El Valencia, con un triunfo por 0-1 en la pasada campaña y por 0-2 en la anterior se ha impuesto de forma consecutiva en sus dos últimos desplazamientos para medirse al Sevilla en el Sánchez Pizjuán, al que no ganaba a domicilio desde 2004, cuando se proclamó campeón de Liga en terreno sevillista.
Ambas victorias se registraron mediada la segunda vuelta de la temporadas, la primera de ellas con dos goles de Rodrigo Moreno y la del último ejercicio con un tanto de Dani Parejo al transformar un penalti de Banega sobre Gayà en el último minuto del primer periodo.
De esta forma, el equipo valenciano truncó una racha desfavorable en el Sánchez Pizjuán de trece partidos en los que acumuló nueve derrotas y cuatro empates entre 2005 y 2017.
El partido más reciente se disputó el 31 de marzo de 2019 y el equipo local formó con Javi Díaz; Jesús Navas, Mercado (Sergi Gómez), Carriço, Wöber; Banega, Gonalons, Amadou (Franco Vázquez), Promes (Bryan Gil); Ben Yedder y Munir.
Por parte del Valencia, la alineación estuvo formada por Neto; Wass, Garay, Gabriel Paulista, Gayà; Soler (Ferran Torres), Parejo, Kondogbia, Guedes (Cheryshev); Rodrigo y Gameiro (Santi Mina).
Ahora, Sevilla y Valencia completarán una serie de 75 partidos de Liga en la ciudad andaluza y los 74 ya disputados se han resuelto con 42 victorias locales, dieciséis empates y otros dieciséis triunfos valencianistas, con 139 goles para el Sevilla y 77 para los visitantes.
Pese a la discreción de los resultados logrados por el Valencia en los años previos a las dos recientes victorias, el Valencia ha vivido rachas de buenos resultados en el Sánchez Pizjuán.
Así, el Valencia atravesó una buena racha sin perder en el campo del Sevilla desde 1992 a 2004, periodo en el que jugó diez encuentros resueltos con siete victorias y tres igualadas.
Sin embargo, allí sufrió el Valencia la derrota más contundente de su historia en la Liga al caer por 10-3 en la temporada 40-41.