El nuevo extremo del Real Valladolid, el chileno Fabián Orellana, ha explicado este miércoles que, tras acabar contrato con el Eibar, se decantó por el Real Valladolid "porque el director deportivo, Miguel Ángel Gómez, presentó un proyecto muy interesante".
"Luego hablé con mi familia y, puesto que la idea era seguir en España, donde me encuentro muy a gusto y donde confío en continuar varios años más, me vine a Valladolid", ha precisado el jugador, quien ha advertido de que su primer objetivo es "hacerlo bien" en su club y, si luego le llaman de la selección chilena, será "feliz".
Según ha indicado en rueda de prensa telemática, terminó una etapa "muy buena" en el Eibar, que espera poder repetir en el Real Valladolid, donde "no" ha encontrado "demasiadas diferencias" con respecto al juego de su anterior técnico, José Luis Mendilibar con el del actual, Sergio González.
"El juego es parecido al de Mendilibar, defender bien y cuando se tiene el balón, atacar lo más rápido posible, con lo que no me ha resultado difícil acoplarme", ha añadido el chileno, quien ha confesado que le da igual "jugar en banda derecha o izquierda", ya que la meta es hacer lo que le pida el entrenador "lo mejor posible, en la posición que determine".
Ha admitido, además, que se encuentra "muy bien físicamente", que el vestuario le ha "recibido bien" y, de hecho, uno de los aspectos que también le atrajo del Real Valladolid es que le transmitieron cualidades inmejorables del ambiente en la plantilla, "gente joven con mucha ilusión", ha precisado.
Cuestionado sobre su "fuerte carácter" ha señalado que es "callado" en algunos momentos, pero cuando tiene que sacar su personalidad, lo hace: "la gente que me conoce sabe cómo soy y no me molesta que hablen los que no me conocen", ha sentenciado.
Respecto a la cada vez mayor presencia de chilenos en la liga española, como Claudio Bravo, Arturo Vidal o el técnico Manuel Pellegrini, Orellana ha comentado: "Es lindo ver jugar a chilenos en la liga española, porque eso quiere decir que lo hacemos bien, y cuanto más lleguen, mejor".
También, tras avanzar que su intención es continuar jugando en España todo lo que pueda, ha querido pronunciarse sobre el superclásico que se disputará este fin de semana en Chile, entre el Colo-Colo y el Universidad de Chile, un partido que llega "en un momento complicado, después del confinamiento, ya que ambos llegan con poco fútbol".
"Vamos a dar empate, pero ojalá haya goles y la gente disfrute", ha precisado el extremo del Real Valladolid, quien ha insistido en que si lo sigue haciendo bien, prefiere "quedarse en España", puesto que, además, "nadie" le ha llamado de su país para regresar a jugar allí.