Las graves lesiones son las peores noticias que puede tener un futbolista durante su carrera deportiva. Cortan grandes momentos, mejores progresiones y buenos rendimientos que llevaban a algunos jugadores directos al estrellato. Ese es el caso de
Carlos Fernández, delantero de la
Real Sociedad, que ya ve la luz al final del túnel después de que esté terminando de recuperarse de una grave
rotura de ligamento cruzado que le ha mantenido alejado de los terrenos de juego durante esta temporada.
El delantero sevillano lleva meses trabajando en silencio para volver a ser ese delantero que deslumbró en el
Granada CF bajo el amparo de
Diego Martínez, su entrenador, que sacó su mejor juego. Fue en aquella temporada, la 2019/2020, cuando el de
Castilleja de Guzmán se hizo con un hueco en
Primera división, siendo titular indiscutible en el
Granada CF donde anotó
14 goles y 4 asistencias entre
LaLiga y
Copa del Rey.
Ese rendimiento le valió para que el
Sevilla FC le diera una oportunidad, pero
Carlos Fernández no cuajó, no rindió y tampoco tuvo la confianza de
Julen Lopetegui, el entrenador sevillista, que dio luz verde para su traspaso a la
Real Sociedad. Una venta a precio de oro, puesto que
el conjunto vasco no dudó en desembolsar alrededor de diez millones de euros para hacerse con los servicios de un ariete que venía de dos temporada a gran nivel, tanto en el
Granada CF como en el
RC Deportivo de la Coruña, con ese en
Segunda división.
Ahora, después de meses y meses de silenciosa recuperación, se ha podido ver ya cómo
Carlos Fernández comienza a entrenar al mismo ritmo que sus compañeros en la
Real Sociedad.
Lleva semanas de acoplamiento físico, puesto que alterna sesiones puntuales con el grupo con otras totalmente en solitario.Aunque su reaparición en partido oficial se espera que sea pronto, se quiere ir con tranquilidad, ya que
Imanol Alguacil, entrenador de la
Real Sociedad, quiere ir con la mayor calma posible y no forzar a un futbolista que tiene en sus rodillas, en su físico, uno de sus principales puntos débiles.
Físico delicado
Carlos Fernández no lo ha tenido fácil para llegar a ser profesional a pesar de ser uno de las mayores promesas surgida de la cantera del
Sevilla FC en los últimos años. Esta lesión de rodilla no es la primera de gravedad que ha tenido, puesto que cuando formaba parte del
Sevilla Atlético, en la
2016/2017, ya padeció de
otra rotura de ligamento cruzado que le cortó la progresión, pero supo reponerse. Ahora,
Carlos Fernández espera repetir la historia.