El personaje de
Álvaro Cervera no ha pasado desapercibido por la ciudad de Cádiz. Eso es, por la ciudad. Así pues, ya no hablemos por su equipo. Después de un poco más de dos meses de una
destitución dolorosa para la afición, el entrenador nacido en Guinea Ecuatorial ha querido analizar su paso por la Tacita de Plata y algunos gestos de cierto equipo como el
Real Madrid con él.
En una entrevista para la
revista Líbero, que ha calificado al técnico como "el mejor entrenador de la historia del Cádiz",
Álvaro Cervera o "El Gafa" para los gaditanos mostró su
desánimo cuando tuvo que abandonar la ciudad de Cádiz. "Lo he pasado mal, ha sido mucho tiempo haciendo lo mismo en un sitio que me gustaba con una rutina agradable para mí", recogió el entrenador.
Por eso que ese sentimiento llegase a ser mutuo en la afición cadista, . La afición cadista despidió a
Álvaro Cervera, su entrenador, por todo lo alto. Aunque este lo califique como que "fue algo espontaneo",
más de un centenar de aficionados lo despidieron con cánticos, como no podía ser de otra forma, a las puertas del estadio. Algo inusual en el mundo del futbol, celebrar la despedida de un técnico
casi como se celebra el pase a una final. Aunque mérito no le falta, fue un entrenador con el que los gaditanos volvieron a disfrutar en
Primera después de muchos años e incluso con el que salieron del pozo de la
2ª B. "Me hace sentir en deuda con esa gente. Lo normal es separarte del personaje cuando te cesan por los malos resultados, y los míos lo eran. Conmigo valoraron otras cosas", contó
Cervera.
Algo curioso tras su cese fue que recibió una llamada de alguien poco usual en su registro de llamadas, como fue el entrenador del
Real Madrid y compañero de profesión,
Carlo Ancelotti. "Me dijo que estuviera tranquilo que formaba parte de nuestro trabajo y que a él le había pasado varias veces, que descansara y que cuando tuviera ganas volviera a entrenar", dijo el 'Gafa'.
"A lo largo de mi carrera el Madrid siempre ha tenido buenos gestos conmigo"
Aunque también cuenta que
no es el primer gesto que el equipo blanco ha tenido con él. "A lo largo de mi carrera el Madrid siempre ha tenido buenos gestos conmigo. Como jugador tuve una lesión muy grave y el único mensaje que recibí fue del
Real Madrid. Cuando ascendimos a
Primera con el
Cádiz, el primer mensaje personal fue de
Butragueño y ahora cuando me ha pasado esto ha sido lo de
Ancelotti. Eso te deja claro quién es el
Real Madrid más allá de las afinidades", quiso apuntar el técnico.
Sin duda alguna
Álvaro Cervera ha sido querido en
Cádiz ya no solo por su trabajo en el banquillo gaditano, sino por su adaptación a una ciudad exigente en las muestras de cariño. "Alguien con cierto nombre en
Cádiz, y que no tiene nada que ver con el fútbol, me llamó dos días después de mi marcha y me dijo que mi éxito en la ciudad no es haber entrenado al
Cádiz, es haber vivido
Cádiz, saber comprender a la gente y haber querido entender la ciudad con sus pros y sus contras", comentó
Álvaro Cervera."Mi éxito en la ciudad no es haber entrenado al Cádiz, es haber vivido Cádiz, saber comprender a la gente y haber querido entender la ciudad"
Que
Cádiz no es una ciudad fácil se sabe y
Álvaro Cervera se lo notó a la gente de allí en cuanto llegó.
El paro, la marcha de los jóvenes de la ciudad y el hecho de no tener un equipo que consiga subirles el ánimo cada fin de semana con sus victorias, hacen que no acompañe mucho a sonreír. Sin embargo
en Cádiz se sonríe. "Amanece un día con esas circunstancias, y saben que mañana amanecerá con esas mismas circunstancias. Se siguen riendo igual. Alguien dijo en el
Carnaval que la gente de
Cádiz trabaja para saber cómo salir adelante sin trabajar. Y eso ya conlleva mucho trabajo. No es vagancia, es necesidad. Es una paradoja que te da que pensar. El umbral de supervivencia y adaptación del gaditano es muy alto", dijo el tan querido 'Gafa' para los gaditanos.
Ojalá la vuelta a los banquillos de
Cervera sea más pronta que tarde. Por su simpatía y seriedad en su trabajo, hacen que cualquier equipo lo tome en cuenta. Aunque hay algo más que claro, no dejará la misma huella que ha dejado en
Cádiz.