David García y Aridane volvieron a formar como pareja de centrales titulares debido a la lesión sufrida por el canario a finales de octubre.
Jagoba Arrasate volvió a alinear a sus dos mejores zagueros ante los verdiblancos para tratar de reencontrarse con la solidez defensiva a la que antaño acostumbraba el conjunto navarro.
El de Ibero siguió con su facilidad de ganar duelos aéreos, pero en el repliegue y en la salida de balón no estuvo muy acertado. Aridane regresó a la titularidad y puede que la falta de ritmo competitivo le fallase a la hora de replegar cuando el Betis salía a toda velocidad.
Pese a ello, se espera que ambos recuperen su mejor versión con el paso de los partidos, algo que se consigue acumulando minutos semana tras semana.
Sin estos dos jugadores como estandartes defensivos sobre el verde comenzó la crisis de resultados de Osasuna. El majorero se lesionó el 24 de octubre ante el Athletic de Bilbao, día en el que queda registrada la última victoria rojilla esta temporada (1-0).
Desde entonces, los pupilos de Arrasate no han conseguido vencer y han acumulado cuatro derrotas (Atlético de Madrid, Sevilla, Barcelona y Betis) y un empate (Huesca) que han conseguido que la alarma de El Sadar suene por todo lo alto.
Con este bagaje, el mes de diciembre se presume como clave para comenzar el año 2021 en buena forma. Para ello, Osasuna tiene la oportunidad de sumar puntos claves ante el Real Valladolid, el Villarreal, el Elche y el Alavés en el último día del año en casa.
Como es sabido, un buen ataque comienza por una buena defensa, dicho que Osasuna debe poner en práctica para comenzar desde la base un juego atractivo acompañado de la presión que tan buenos resultados ha dado a Arrasate desde que cogió las riendas del equipo.