Llegó a España avalado por Rivaldo y en el Málaga vivió a la sombra de Catanha; el brasileño que se cayó varias veces regateando a sus rivales...

Una de las carencias del Málaga CF 21/22 es su falta de un delantero centro puro que aporte esa pegada que todo equipo necesita. Una ausencia de gol, de un 'killer', que la dirección deportiva blanquiazul que lidera Manolo Gaspar no supo paliar el pasado mercado de enero, entre otras cosas, porque la delicada situación económica por la que atraviesa el club blanquiazul tampoco ayuda a ello.

De ahí que no sea de extrañar, tampoco, que el exmalaguista Adrián López esté a prueba con el club blanquiazul, recuperándose de unos problemas físicos que arrastraba y poniéndose a tono para intentar firmar por el Málaga CF hasta final de temporada, encontrándose sin equipo desde que saliera de Osasuna el pasado verano.

Gol es lo que busca el Málaga CF ahora y gol es lo que buscaba en la 99/00, la del ascenso a Primera, cuando incorporó a sus filas al brasileño Genilson, quien llegó a La Rosaleda avalado por el mismísimo Rivaldo, al que ciertas fuentes (Amigos Malaguistas y Los Bokerones también lloran) catalogan como su primo. Su estrecha amistad fue clave para su llegada a España, aterrizando en Málaga con la vitola de gran goleador brasileño.

Genilson, el primo de Rivaldo que fichó por el Málaga CF en la 99/00

Y no era para menos, ya que, junto a Rivaldo como aval, su hoja de vida también contaba con 26 tantos en 30 partidos con el Figueirense en su primera temporada en la Primera división brasileña.

A diferencia de otros futbolistas brasileños, Genilson no comenzó en la cantera de un gran equipo de su país. Lo hizo en el Uniao Suzano de la Tercera división brasileña en 1994. Y de ahí fue en ascenso, pasando el curso siguiente al Xaraguatatuba de Segunda división, donde militó durante dos temporadas hasta volver a Tercera, con el Joinville. De ahí, al ABC Natal, donde firmó ocho goles en 32 partidos. Unos movimientos que ya podían presagiar el petardazo en el que se convertiría, y es que llama realmente la atención cómo vuelve a pasar de la tercera división brasileña a Primera, con el Figueirense, donde literalmente se salió de cara a gol.



Unos golosos registros que fueron suficientes para que la dirección deportiva del Málaga CF se fijara en su nombre, viéndolo como la pareja ideal para su compatriota Catanha al ataque. Y así, mientras que el que a la postre se acabaría convirtiendo en internacional español, Catanha, acababa firmando una temporada de ensueño en la que sumó 24 dianas, Genilson acabó jugando literlamente tres ratos. O lo que es lo mismo, 65 minutos en tres partidos; ante Alavés, Real Madrid y Mallorca. Nunca como titular, siempre saliendo desde el banquillo.

La prensa del momento lo recuerda como ausente y distraído, siendo destacado, también, que se cayó en más de una ocasión al intentar regatear a sus rivales. A eso se reduce la efímera carrera como malaguista de Genilson, quien compartió vestuario en Málaga con hombres como Fernando Sanz, Darío Silva, Movilla o Sandro, entre otros. Y que en una de sus actuaciones en España pudo enfrentarse sobre el campo al Real Madrid de Raúl, Guti, Sanchís...

Tras ello se marchó al Santa Cruz y comenzó un tour futbolístico por Brasil en la que cambió de equipo temporada tras temporada. En ninguno cuajaba, y tampoco era extraño, viendo lo visto en Málaga. En total, 13 clubes en nueve temporadas hasta que se acabara retirando en 2009. Hoy por hoy, nada más se ha vuelto a saber de él.