El yin y el yang. Ese es el Málaga, tan demoledor en casa como timorato como visitante. En Cartagonova, volvió a mostrar su peor versión, la de un equipo incapaz de dominar, poco efectivo en ataque y blandito en su propia portería. El Cartagena, con un doblete de Rubén Castro a sus 40 años y un tanto de Pablo, se llevó un triunfo que no fue inquietado ni cuando Peybernes redujo distancias. El asalto a los playoffs deberá esperar para cuando los blanquiazules ejerzan de anfitrión.
Y eso que el Málaga quiso parecerse al de casa desde el inicio y no dudó en realizar una presión asfixiante para ahogar la salida del Cartagena. Pero los de Carrión tenían aprendida la lección, utilizando su buen juego combinativo desde la zaga para acercarse con cierto peligro a la portería de Dani Martín. Al poco del inicio ya fue exigido por un latigazo desde la frontal de Clavería que acabó en córner. El asedio, a pesar de alguna buena subida de Javi Jiménez, continuó durante algunos minutos más con un pase filtrado a Douda ante el que respondió de maravilla un providencial Juande cuando el extremo ya se encontraba cerca del área pequeña.
Sufría el cuadro malacitano viendo cómo Álex Gallar entraba cada vez más en acción, adueñándose de la parcela ancha para filtrar balones. Los pupilos de José Alberto intentaron recuperar la iniciativa a través de la posesión, pero una y otra vez aparecían Budiger y Clavería para robar todos los balones que pasaban por su zona y abrir el juego a las bandas. Por allí, Kevin y Antoñín tenían que recorrer muchos metros hacia su propia meta para frenar las embestidas de Delmás y De la Bella.
El dominio, sin embargo, no le costaba disgustos a un Málaga que, en todo caso, era incapaz de generar peligro a un inédito Marc Martínez. Eso hasta que, a un minuto del descanso, el colegiado pitase un riguroso penalti que no desaprovechó Rubén Castro. Cumplirá otros 40 años más y seguirá marcando goles, aunque sean desde la pena máxima. También eso es un arte.
En los vestuarios, el técnico dio salida a Brandon por un desaparecido Kevin. Pero el cambio no fue solución porque los problemas venían, principalmente, desde el plano defensivo, con muchos desajustes, y desde el mental, porque el gol al filo del descanso hizo mucho daño. Como lo produjo el tanto de Pablo al rematar de cabeza una falta lateral. No se puede defender peor, salvo que te llames Málaga CF. Era el minuto 54 y aún quedaba tiempo para reaccionar. Y movió de nuevo baza el técnico malaguista dando minutos a un recuperado Sekou, a Jozabed y a Cufré. Pero nada de nada. Al contrario, otra falta, en esta ocasión directa, lanzada desde la media luna del área grande por Rubén Castro, se coló por toda la escuadra. Imparable. 3-0 y todo sentenciado.
Lo único positivo de los malaguistas es que tienen alma a pesar de lo mal que le pueden ir las cosas. Y por ahí, por esa insistencia, pudo cantar un gol. El de Peybernes, tras un córner y un rechace de Marc Martínez que cazó el zaguero francés. Pudo incluso, ya en el añadido, anotar un segundo tras un remate de Juande que se fue al palo. En todo caso, sirvió para mostrar su orgullo, la honra y poco más. Un nuevo gatillazo del Málaga lejos de La Rosaleda.
FICHA TÉCNICACartagena: Marc Martínez; Delmás, Andújar (Alcalá, 83'), Pablo V., De la Bella; Álex Gallar, Clavería (Boateng, 78'), Bodiger (Josema, 83'), Dauda; Okazaki y Rubén Castro (Ortuño, 75').
Málaga: Dani Martín; Víctor Gómez, Juande, Peybernes, Javi Jiménez (Cufré, 60'); Kevin (Brandon, 46'), Ramón (Ismael, 80'), Genaro, Antoñín (Jozabed, 60'); Paulino y Roberto (Sekou, 60').
Goles: 1-0, min. 44: Rubén Castro marca de penalti. 2-0, min. 54: Pablo remata de cabeza una falta lateral. 3-0, min. 64: Golazo de falta de Rubén Castro. 3-1, min. 81: Peybernes caza un rechace de Marc para batirle.
Árbitro: Arcediano Monescillo (Comité castellano-manchego). Mostró amarilla a Andújar (4'), Javi Jiménez (8'), Genaro (37'), Víctor Gómez (44'), Paulino (61'), José Alberto López (67'), Peybernes (78') y a Neskes (93')
Incidencias: Partido correspondiente a la jornada 15 de Segunda división disputado en el Municipal de Cartagonova. Unos 200 aficionados malaguistas estuvieron presentes en la grada.