La llamativa similitud entre el Granada de ahora y el de Diego Martínez

Que el Granada lo va a pasar mal hasta final de temporada es algo esperado. Los muchos encuentro que quedan por disputar, además de la dificultad que supone alguno de ellos hacen prever un final de temporada muy agitado. La salvación para los de rojo y blanco pasa por Los Cármenes, pues recibe al Levante, Celta, Athletic Club y Espanyol; por Atlético de Madrid, RCD Mallorca y Real Betis a domicilio. Dos de ellos, peleando por puestos de Champions League.

El cambio de entrenador ya hacía ver que el proyecto del Granada en Primera se tambaleaba, por lo que tras la derrota ante el Valencia en Mestalla por 3-1, la directiva se reunió para decidir el futuro de Robert Moreno, que fue finalmente destituido y cuyo cargo ocupó el interino Rubén Torrecilla.

Uno de los puntos a cambiar para el entrenador extremeño es la extrema fragilidad defensiva que presenta su equipo, pues en lo que va de temporada ha encajado 52 goles, uno más que en la misma jornada de la pasada campaña, cuando Diego Martínez triunfaba por Europa y hacía temer a los equipos más grandes de Europa, ganándose así un respeto su equipo.

La temporada pasada, el Granada registró otro hecho histórico, quedar novenos siendo el segundo equipo del viejo continente con más partidos disputados; solo por detrás del Tottenham inglés. A pesar de terminar en una posición más que decente, la escuadra dirigida por Diego Martínez fue el equipo que más goles en contra de toda la Primera división española con 65.

Ahora, el dibujo es bien distinto. Al contrario que el final de temporada anterior, el Granada encara estos próximos meses partidos de infarto en los que tendrá que pelear por sumar de tres en tres si no quiere verse en apuros en mayo, cuando tendrá que afrontar encuentros muy complicados ante Betis a domicilio y Athletic Club y Espanyol en el Nuevo Los Cármenes.

Va camino de ser una de las temporadas con más goles en contra de toda la historia de Primera, pues la fiabilidad defensiva no es algo que esté ahora mismo en su punto más álgido. Ni con Robert Moreno, ni con Rubén Torrecilla. Por ello, una de las labores que el técnico cacereño debe grabarse a fuego es conseguir ese muro que fue el Granada en un día con, prácticamente, la misma defensa de esta temporada: Neva -lesionado-, Germán, Domingos Duarte y Quini, aunque Víctor Díaz también está en la recámara.