El Granada
cuenta con cuatro jugadores que en este momento actúan en otros conjuntos en condición de cedidos por el club nazarí. Dos de ellos,
Antoñín y Adrián Marín, vistieron la elástica rojiblanca horizontal durante los últimos cursos; los otros dos,
Ricard Sánchez y Alpha Dionkou, apenas pasaron por la ciudad de la Alhambra para firmar su contrato y zanjar su préstamo. Todos firmaron contratos que aún se extienden más allá de esta campaña, tras llegar en distintas circunstancias y con diferente rol, y ahora se desempeñan lejos de Los Cármenes con suerte bastante homogénea.
El primero en incorporarse al Granada fue Antoñín, de 21 años, procedente del Málaga. Su fichaje en el mercado invernal de la temporada 2019/2020 -entonces tenía 19- reforzó la delantera del conjunto entonces dirigido por Diego Martínez. Entró en la rotación rojiblanca durante el tramo final de aquel curso, aunque
no logró hacerse un hueco entre los titulares habituales del técnico vigués. Jugó nueve partidos entre Liga y Copa, en los que marcó un solo gol.
A la campaña siguiente, cuando se esperaba de él un paso al frente en el vestuario, pero su ausencia en la lista de las rondas de clasificación previas a la Europa League le entregaba un billete hacia otro equipo en el que pudiera seguir ganando experiencia. Encontró acomodo en el Rayo Vallecano, en Segunda, y su rendimiento fue notable durante la primera mitad del curso, actuando casi siempre como relevo. Anotó cinco goles hasta entonces, pero el cambio de año le mojó la pólvora.
Cerró el curso con seis tantos en 27 partidos, de los que fue titular en 16.El malagueño tampoco logró convencer a Robert Moreno durante el pasado verano, por lo que volvió a hacer las maletas tras la pretemporada, para jugar de nuevo en Málaga, a préstamo por el cuadro rojiblanco. Allí, en este ejercicio ha disputado 19 partidos entre Liga y Copa, una decena de ellos como titular, durante los que ha logrado marcar un gol.
Tiene contrato con el Granada hasta junio de 2024 y el conjunto malacitano no dispone de opción de compra sobre el atacante.
Sí se incluyó tal beneficio en el acuerdo con el Famalicao luso para la cesión de Adrián Marín. El lateral zurdo, de 25 años, se incorporó al Granada en el mercado invernal de la pasada temporada, ante la necesidad del conjunto rojiblanco de disponer de una alternativa a Carlos Neva. Jugó en total nueve partidos, solo tres de titular, sin persuadir a Diego Martínez, a pesar de que dejó para el recuerdo
una bonita asistencia a Jorge Molina en el Camp Nou. Tampoco Robert Moreno le vio en su plantilla el pasado verano, por lo que se le buscó una nueva camiseta.
En Portugal, Marín se hizo con el puesto de titular desde el inicio. Ha jugado 16 encuentros con el conjunto luso, que pelea por la salvación, 14 de ellos como parte de la alineación. Además, ha adornado sus estadísticas con un gol. Queda por ver si su rendimiento hace decantarse al conjunto portugués por abonar la cantidad fijada para su traspaso. Si no, regresaría en junio al Granada, donde
tiene contrato hasta 2023.Ricard Sánchez y Alpha Dionkou fueron dos de los últimos fichajes del Granada en el pasado mercado de fichajes, considerados ambos promesas con potencial para ser opciones futuribles para el primer equipo rojiblanco. Por ello se les hizo un contrato de larga duración,
hasta junio de 2025. Su marcha también se fraguó sin incluir opciones de compra, dado que, en principio, el club contaría con ellos en cursos venideros.
El último de ellos es el más joven, con 20 años. Lateral derecho, se unió al club nazarí
procedente de las categorías inferiores del manchester City, previo paso por el Mallorca, y ahora se foguea en el San Fernando, en la Primera RFEF. Ha jugado hasta la fecha 14 partidos entre Liga y Copa, 12 como titular. Sánchez, también lateral diestro, tiene 21 años y
llegó al Granada tras formarse en el Atlético de Madrid, con el que llegó a debutar en el trofeo del KO. Juega ahora en el Lugo, en Segunda división, con el que acumula 14 duelos, 10 como titular, y dos asistencias.