Carles Aleñá está viviendo uno de sus mejores momentos futbolísticos en el
Getafe CF. El centrocampista catalán se ha asentado como un titular indiscutible en el equipo del sur de
Madrid y la suerte en los partidos del club azulón en
LaLiga pasa en parte por las botas, el buen hacer y el talento del de
Mataró, el cual sonríe cual niño pequeño jugando en la plaza de su barrio.
Tanto con
Míchel González, hasta su destitución, como ahora con
Quique Sánchez Flores como entrenadores en el
Coliseum,
Carles Aleña tiene su puesto en un once titular en el que la competencia es muy dura, ya que
Maksimovic y
Arambarri son indiscutibles en la medular, pero con los que
Aleñá se asocia o casa a la perfección, puesto que el catalán se posiciona por delante de ellos conjugando su creación de juego y calidad con el trabajo, sacrificio y recorrido del serbio y del uruguayo. Una combinación y equilibrio perfectos que le ha permitido al
Getafe CF salir de los puestos de descenso a Segunda división cuando al comienzo de esta temporada.
Carles Aleñá es el prototipo perfecto de jugador nacido, formado y criado en
La Masía del
FC Barcelona. Un futbolista con buen pie, toque que encaja en el fútbol de posición que tanto se promulga en los escalafones inferiores del equipo azulgrana. Producto de ello, no son pocos los canteranos barcelonistas que lejos del conjunto que les ha hecho profesionales no encuentran su sitio.
No encontró su mejor fútbol en el Real Betis
De hecho al propio
Carles Aleñá le costó rendir tal y como lo está haciendo hoy en día. Sólo hay que recordar cómo su paso por el
Real Betis de
Rubi no terminó de ser fructífero a pesar de la fuerte apuesta que realizó el cuadro de Heliópolis, puesto que la entidad verdiblanco cerró su contratación, en forma de cesión,
en diciembre, antes de que se abriera el mercado de invierno de la temporada 2019/2020, renunciando así a la posibilidad de que Dani Ceballos regresara al Real Betis, ya que el entorno de jugador de Utrera hizo un movimiento de aproximación en ese enero de 2020 que no se llegó a culminar.En aquel
Real Betis no se vio al mejor
Aleñá, seguramente por la mala dinámica en la que estaba metido aquel equipo por ello, el préstamo no se prolongó y regresó al
FC Barcelona, el cual lo cedió al
Getafe CF el pasado curso donde ya dio atisbo de lo que puede ser. Satisfecho por las prestaciones de
Aleñá, el
Getafe CF no dudó este verano y decidió comprar de forma definitiva al centrocampista de
Mataró por una cantidad de
5 millones de euros.
Una inversión mínima para el Getafe CF
Una inversión que puede convertirse en una ganga si tenemos en cuenta que a sus 24 años y con contrato hasta 2026, Carles Aleñá sólo hace evolucionar y mejorar futbolísticamente por lo que puede ser en un futuro, más cercano que lejano, un activo que genere unos fuertes ingresos.