El presidente de la Asociación de Clubes de Fútbol Femenino (ACFF), Rubén Alcaine, recalcó este martes que el deseo de su organismo es el de sacar un Convenio Colectivo "de mínimos" con el que acabar la presente temporada y desde el cual puedan "seguir trabajando y construyendo" en uno que se acerque más a las pretensiones actuales de sindicatos y futbolistas, que siguen rechazando pese a la convocatoria de huelga porque no harán "ningún movimiento que obligue a un club a la desaparición".
"Queremos hacer un primer convenio de mínimos y a partir de aquí seguir trabajando y construyendo. Creemos que es importante cerrarlo y que deberíamos hacerlo para empezar con esos mínimos durante un año para que el que viene no haya casi más que hablar que del salario", subrayó Alcaine en rueda de prensa, donde opinó que "hay un montón de puntos de encuentro en lo que manifiestan las jugadoras como las bajas".
El dirigente, que habló en nombre de los 13 clubes que forman la asociación (FC Barcelona, Athletic y Tacón no pertenecen), recalcó "el crecimiento del 30 por ciento en la masa salarial" de las futbolistas respecto al año pasado. "A día de hoy hay una media salarial de las jugadoras de los equipos asociados de más de 17.000 euros", señaló.
El vicepresidente del Zaragoza CFF volvió a dejar claro que los sindicatos y las jugadoras reivindican "unas condiciones que en las circunstancias actuales y con la generación actual de ingresos no son acordes a la realidad actual".
"No vamos a hacer ningún movimiento que obligue a un club a la desaparición", advirtió. "Sin convenio, el 75 por ciento de las jugadoras de los 13 clubes de la Asociación superan las condiciones que exigen los sindicatos", agregó, al tiempo que dijo tener constancia de que "hay jugadoras que no están de acuerdo con la huelga", pero que no saben aún "realmente" cuantas ejercerán este derecho.
Además, tras no negar "ninguna vía de negociación que facilite este desbloqueo", consideró que tanto el CSD como la RFEF tendrían que ser "un agente más en estas negociaciones". En este sentido, están citados en Las Rozas el próximo 6 de noviembre para "tratar temas del fútbol femenino". "Pero ese no es el foro para desbloquear esta situación, aunque desconocemos para lo que se nos ha convocado", aclaró.
Del mismo modo, tras remarcar que vería con buenos ojos "si la RFEF manifiesta como federación que va a destinar un dinero a todos los clubes y no sólo a los que se acojan a un programa" para poder alcanzar las pretensiones de los sindicatos y las jugadoras, confirmó que aún no han recibido el dinero de la pasada temporada. "Es un sistema algo complejo, pero Iberdrola ha pagado y al final es la RFEF la receptora de esa donación y quien la reparte, pero los clubes no lo hemos recibido", informó. "La UEFA pone dinero, pero aquí no ha llegado", ahondó.
Lola Romero: "No hay máquinas de hacer billetes"
Por su parte, Lola Romero, directora general del Atlético Femenino y vicepresidenta de la ACFF, aseguró que todas las partes tienen "igual de ganas" de que se firme un convenio, que fue demandado por la asociación antes de que se convocase la mesa negociadora.
La dirigente también resaltó que han hecho "una cantidad de concesiones" y que debía firmarse un documento que tuviese sólo "un año" de duración y "no para tres o cuatro". "No hay máquinas de hacer billetes", declaró sobre las peticiones sobre la parcialidad de los contratos y los 16.000 euros de salario.
"Todos los clubes entendemos que las jugadoras puedan merecer más. Si hay dinero siempre es para ellas y nuestra idea es que siga creciendo y que se llegue al 75 y al cien por cien, pero cuando se pueda, que sea progresivo y asumible. Nos da miedo poner este convenio hacia delante y que en enero haya impagos, y eso es muy duro", avisó.
Para Romero, estas peticiones no se pueden hacer de forma tan rápida. "Entendemos que las jugadoras quieran cada vez más, pero debe ser de una forma sostenible. Hay clubes con jugadoras al 50 por ciento, otros al 75 y otros al 100. ¿Cómo vas a hacer eso en noviembre y con los presupuestos cerrados?", indicó, apuntalando su opinión con las cifras que arrojan sus estudios. "Una jugadora que cobra 40.000 podría costarle a un club 80.000, si se duda de las cifras es complicado", dijo.
"Estoy segura de que vamos a llegar a lo que piden los sindicatos, pero poco a poco, y así lo entendía el SIMA. Es complejo incluso para los clubes que ya están pagando muy bien, y hay otras muchas cosas que negociar y que tienen que ver con los ingresos de las jugadoras", prosiguió la vicepresidenta de la ACFF, que calificó de "populismo muy gratuito" que se haya aludido a cláusulas 'antiembarazo'. "Eso es mentira y además ilegal", sentenció.
Finalmente, Julio Luis Pérez, vicepresidente de la UD Granadilla, aseveró que "no" existen presiones sobre las futbolistas para que no hagan huelga y que algunos clubes están en situación "de precariedad" por no haber cobrado aún el dinero de la temporada pasada.
Además, se refirió al caso de su equipo en particular en la primera jornada de huelga, en la que se medirían al RCD Espanyol en la Ciudad Deportivas Dani Jarque el sábado 16. "Son unos 6.500 euros el traslado, que en nuestro caso es el viernes, que no es día de huelga, por lo que tenemos que viajar porque el rival se puede presentar con siete u ocho jugadoras y entonces perderíamos por incomparecencia y nos restarían tres puntos. El daño sería económico y deportivo", manifestó.