Con la salvación conseguida de forma agónica en el estadio de
Mendizorroza, donde ganó al
Deportivo Alavés por
0-1, el
Cádiz CF deja atrás ya la última dramática y tortuosa temporada en
LaLiga y se centra en la siguiente, en la cual tiene como objetivo la permanencia en
Primera división, pero esta vez intentándola conseguir sin tanto sufrimiento. Para ello, ya se están dando los primeros pasos para formar una plantilla lo más competitiva posible y complacer a
Sergio González, entrenador de los amarillos, que ha realizado un trabajo excepcional, dotando al equipo de un buen juego y grandes resultados a un equipo que no estaba en su mejor momento de forma cuando él llegó. También hay que decir que algunos fichajes fueron muy importantes para esta mejoría, siendo uno de ellos
Rubén Alcaraz, ya que el centrocampista se asentó rápidamente como uno de los puntales en el esquema táctico de su técnico, el cual no pidió tras tenerlo en el
Real Valladolid. Pues bien,
Rubén Alcaraz será uno de los de primeros problemas que le han surgido al
Cádiz CF de cara al próximo curso futbolístico, puesto que el barcelonés ha caído lesionado de gravedad en el amistoso que jugó
Cataluña contra
Jamaica, que finalizó con goleada de la selección autonómica por
6-0.
Rubén Alcaraz, centrocampista el
Cádiz CF, ha sufrido una rotura del ligamento lateral de su rodilla, lo cual le tendrá alejado de los terrenos de durante los próximos cuatro meses. Por tanto, se espera que el centrocampista no esté disponible hasta finales de septiembre o principios de octubre, por lo que se perderá los primeros meses de competición, quedándole poco espacio de tiempo de juego hasta mediados de noviembre, momento que habrá el parón de la temporada debido la disputa del
Mundial de Qatar durante los dos últimos meses de este
2022.
Podría haber sido peor, puesto que en las primeras exploraciones que se le hicieron se temía que
Rubén Alcaraz podía tener dañado el ligamento cruzado, que lo hubiera tenido fuera durante un período de tiempo de seis meses en adelante, pero las exploraciones posteriores que le realizaron descartaron dicha lesión más grave.
Después de que el
Cádiz CF obtuviera la permanencia en
LaLiga, el equipo amarillo ejecutó la opción de compra que tenía por el centrocampista catalán, que estaba cedido por el
Real Valladolid, valorada en un millón de euros, comprometiéndose, a sus
31 años, hasta junio de
2024 con la entidad cadista.