Movimientos de mercado, conversaciones de representantes con clubes, futbolistas que quieren dar un paso más en su carrera deportiva... el comienzo del siempre tumultuoso mercado de fichajes está cercano y los equipos comienzan a prepararse para intentar atraer a sus proyectos deportivos a los mejores jugadores posibles que les puedan dar un nuevo salto de nivel futbolístico. Algunos de estos son más precavidos y otros son más envalentonados mostrando sus preferencias sin importarles las consecuencias que puedan tener en su actual club. Esto es lo que le ha ocurrido a
Nahuel Molina, futbolista del
Udinese, compañero de
Gerard Deulofeu y antiguo deseo del
Sevilla FC, que se ha dejado querer ante un interés del
Atlético de Madrid que lo desea fichar de cara a la próxima temporada.
"¿Juve, Arsenal, Atlético de Madrid? Me llena de orgullo que se hable del interés de clubes de este calibre. Pero ahora mismo mi cabeza está con el Udinese y con la selección, con la que sueño con ganar el Mundial. Veremos.
Siguiendo los pasos de De Paul, que del Udinese se fue al Atlético de Madrid, me gustaría dar ese salto cualitativo en algún momento de mi vida futbolística. Pero mi mente en este momento está centrada en terminar lo más arriba posible con el Udinese", afirmó el
lateral diestro que estuvo en la agenda de
Monchi, director general deportivo del
Sevilla FC, durante el verano pasado, pero que finalmente no llegó, puesto que la escuadra de
Nervión se decantó por su compatriota
Gonzalo Montiel por el que no dudó en desembolsar unos
once millones de euros.
Nahuel Molina, a sus
24 años, se ha asentado como titular indiscutible en el
Udinese, donde ha jugado este año
33 partidos en los que ha marcado seis goles y dado cuatro asistencias en la
Serie A. Además, se ha hecho con un puesto en la selección de
Argentina, en las listas de
Lionel Scaloni, donde compite con el propio
Gonzalo Montiel por un lugar en el once titular.
Ahora, el de
Embalse se ve preparado para dar un salto deportivo, apareciendo en el horizonte un
Atlético de Madrid que necesita de un lateral diestro después de que la demarcación se haya debilitado por la marcha de
Kieran Tripper al
Newcastle United durante el pasado invierno y de que ni
Daniel Wass y
Sime Vrsaljko no convenzan a
Diego Pablo Simeone, entrenador del
Atlético de Madrid.
Aun así no será fácil sacar al argentino del
Udinese dado que tiene contrato hasta
2026, habiendo renovado en 2021, y a que está tasado en unos
10 millones de euros.