Hace justo un año,
el 12 de marzo de 2020, las autoridades deportivas confirmaban que todas las competiciones deportivas paraban 'sine die' ante los durísimos estragos que estaba causando la
pandemia mundial de coronavirus.
LaLiga se paró justo antes de El Gran Derbi, del partido de los partidos en la capital de Andalucía y el que probablemente sea el mejor duelo de máxima rivalidad que hay en todo el planeta. La competición
se retomó tres meses después y, desde entonces,
en los estadios reina el silencio ante la ausencia de las añoradas aficiones. El primer encuentro sin público fue precisamente el que disputaron en el
Ramón Sánchez-Pizjuán el
Sevilla FC y el
Real Betis, que este domingo se ven las caras en las mismas fechas en las que tendrían que haberse enfrentado hace un año.
Ha sido
el año del coronavirus. Desde el 8 de marzo de 2020, con el
Betis-Real Madrid como último choque en el que se gritaron goles, hasta este domingo 14-M, se han disputado un total de
36 jornadas, 10 de la
19/20 y otras 26 de la presente 20/21.
Es casi un campeonato completo.
ESTADIO Deportivo ha analizado todos los datos que ofrece esta
Liga pandémica, como no podía ser de otro modo, desde el enfoque de los dos principales clubes de la capital hispalense.
El
Sevilla FC ha tenido un
rendimiento mucho más estable. Llega a este partido en un
momento de dudas tras perder cuatro de los seis últimos partidos y decir adiós a dos de las tres competiciones en liza. Sin embargo, la vuelta en
Dortmund sirvió para
reencontrar ese orgullo y esa competitividad perdidas en 20 fatídicos días. El de Alemania sí fue el equipo que ha mostrado una regularidad y una solidez envidiables desde que se decretó el Estado de Alarma hace 12 meses.
En estas
36 jornadas de confinamientos, mascarillas, PCR y partidos a puerta cerrada, los de Lopetegui han sido capaces de
ganar la friolera de 21 de ellas, con ocho empates y sólo siete derrotas; para ser de manera holgada el
cuarto mejor club de esta parcial clasificación doméstica con
71 puntos, con
12 de ventaja sobre su principal perseguidor, el Villarreal.
Con
sólo 25 goles en contra, la nervionense es la
segunda mejor defensa de España en la 'era Covid'. Sólo ha concedido dos dianas más que el hermético Atlético de Madrid de Simeone y Oblak. Si la seguridad defensiva ha sido su punto fuerte, el flaco quizás apunta a que Lopetegui
no ha sido capaz de aprovechar todo el caudal realizador que tiene en su plantilla, que siendo la cuarta mejor en puntos y la segunda en tantos en contra, sólo alcanza a ser el
séptimo mejor ataque con
50 dianas. Pocas, para su capacidad.
Por su parte, el
Real Betis llega liberado y lanzado a este duelo cainita. Después de aprovechar el derbi de la primera vuelta (1-1, el pasado 2 de enero) como
punto de inflexión, ha descargado en este 2021 el saco de complejos y presión que cargaba a la espalda y ha encontrado por fin la
inercia positiva que necesitaba como equipo, como club y también de manera individual; con los casos de Borja Iglesias o Diego Lainez como los más relevantes y significativos.
Con
cuatro victorias seguidas y una única derrota desde el cambio de año, los de Pellegrini han encontrado por fin el
equilibrio en el campo y esos resultados que aportan
confianza para seguir creyendo en una manera de hacer las cosas. Visitan Nervión en el mejor momento de los últimos años, asentados en el sexto puesto de la tabla, a tres del quinto y con opciones de soñar con la Champions, pues de ganar se pondría a sólo tres del Sevilla FC (que tiene un partido menos que recuperará el miércoles ante el Elche).
Esta
buena dinámica ha maquillado el
irregular parcial durante esta pandemia. Con
tres entrenadores (Rubi, Alexis como interino y Pellegrini), el Betis ha remontado hasta una
octava plaza en la Liga del coronavirus, muy meritoria a tenor de lo mal que acabó la 19/20. Ha sumado
50 puntos en este año (41 de ellos en la 20/21) y estaría a sólo
cinco del 'umbral europeo' a pesar de ser, con diferencia,
una de los peores defensas del campeonato nacional. Tanto es así, que sólo el Alavés (64) empeora los
57 tantos recibidos por los verdiblancos (los mismos que el Granada) en estas 36 jornadas de marzo a marzo. Eso, y que arriba sólo le dio para ser el
décimo mejor anotador con
46 dianas.
En cuanto a los
partidos como local, el Sevilla FC ha mantenido el
Sánchez-Pizjuán como ese
fortín del que resulta muy complicado sacar puntos. Ha sido el
tercer mejor en casa con 39 puntos sumados, por delante del Barcelona, y el menos goleado del país con
sólo 10 tantos concedidos en 18 encuentros; los mismos que recibieron Atlético y Real Madrid. El Betis, por su parte, acabaría esta peculiar clasificación como el
séptimo mejor anfitrión de LaLiga, con 30 puntos; los mismos que Valencia y Athletic y sólo uno por debajo de Villarreal y Granada.
Es decir, los helipolitanos estarían
rozando 'puestos europeos' si sólo contasen los encuentros en el Benito Villamarín; porque
lejos ha sido un desastre: el noveno visitante con
20 puntos y un saco de goles en contra. Lejos de Nervión, sin embargo, el Sevilla FC ha mantenido un rendimiento similar (por momento incluso superior) a los de casa. Ha sido capaz de sumar
32 unidades a domicilio, siendo el cuarto mejor equipo sólo por detrás del triunvirato de gigantes.
El mejor, el
líder de esta 'Liga de la pandemia', sería el
Atlético con sólo dos puntos más que su vecino y máximo rival, el
Real Madrid, con el
FC Barcelona completando el podio.
El peor de los que han sido capaces de jugar las 36 jornadas ha sido el
Alavés; pero estos datos importan menos en la capital andaluza. Aquí
sólo importan el Sevilla FC y el Real Betis. Lo demás es secundario. Sólo importa
El Gran Derbi. El número 100 en Primera división, el tercero que se disputa sin público en las gradas. Esperemos que sea el último.