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Las árbitras se asoman a las categorías masculinas

Las árbitras se asoman a las categorías masculinas
Las árbitras se asoman a las categorías masculinas - Rebeca Santamaría
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Este sábado la colegiada Guadalupe Porras integrará el equipo arbitral del balear Guillermo Cuadra en el Betis-Leganés. Será la segunda vez que la pacense, que ha sido la primera mujer en debutar en la máxima categoría del fútbol español, corra la banda en primera división.

La designación histórica de la árbitra francesa Stephanie Frappart para dirigir la final de la Supercopa de Europa entre Liverpool y Chelsea celebrada en Estambul el 14 de agosto fue la punta de lanza de la nueva generación de árbitras que tímidamente se va asomando a las competiciones de fútbol masculinas tanto nacionales como internacionales.

La colegiada gala ha sido la más mediática hasta el momento aunque el camino lo inició la suiza Nicole Petignat que el 13 de agosto del 2003 arbitró al AIK sueco contra el Fylkir islandés en un partido de clasificación de la Liga Europa, antes llamada Copa de la UEFA.

Petignat que también fue jugadora, dirigió durante sus años en activo 91 encuentros de la Superliga, máxima categoría masculina suiza, donde llamó la atención de la UEFA que decidió incluirla en su nómina.

La Ligue 1 francesa inició el camino en las grandes ligas al designar por primera vez en su historia a una mujer, Stephanie Frappart, para dirigir un partido de la máxima categoría francesa, el que enfrentó al Amiens y al Estraburgo en La Licorne el 28 de abril del 2018. La colegiada se puso al frente de un equipo arbitral donde ella era la única mujer.

En Alemania Bibiana Steinhaus arbitra encuentros de la primera categoría desde 2017. Esta temporada todavía no debutado al tener pendientes las pruebas físicas debido a unas molestias musculares. La colegiada de 40 años, se inició en la máxima categoría el 10 de septiembre del 2017 en la tercera jornada de la Bundesliga en el partido Hertha contra Werder Bremen y que terminó con empate (1-1).

Según los medios alemanes y después de dos años, la comisaria de policía no tiene de momento sucesora en la federación debido a la escasez de vocaciones arbitrarias que padece la competición.

En Inglaterra Sian Massey-Ellis corrió la banda el 10 de agosto como asistente en el Tottenham-Aston Villa en la jornada inicial de la Premier. El fin de semana anterior formó parte del equipo arbitral de Martin Atkinson que dirigió la Comunity Shield entre el Liverpool y el Chelsea

Massey- Ellis de 33 años es una veterana en los partidos de la Premier masculina, que cuenta con su presencia desde el 28 de diciembre del 2010 cuando se estrenó en el choque que enfrentó al Blackpool y al Sunderland (2-0) siguiendo así el camino iniciado por Wendy Tom que en 1997 debutó como linier en la máxima categoría inglesa.

Tanto Italia como Portugal siguen siendo terreno no pisado todavía por las mujeres de negro. En Italia, el presidente de la asociación de árbitros Marcello Nicchi en declaraciones a la agencia ANSA estimó que en dos o tres años podrían llegar árbitras a la Serie A, aunque de momento se concentran en las series C y D. Según Nicchi, en Italia "más de 1.600 mujeres se dedican al arbitraje".

A nivel internacional la FIFA ha anunciado los componentes del cuerpo arbitral, asistentes y VAR del Mundial sub-17 de Brasil 2019, en el que figuran varias colegiadas. Entre ellas destacan la uruguaya Claudia Umpierrez, que estará auxiliada en las bandas por su compatriota Luciana Mascarana y la ecuatoriana Mónica Amboya, mientras que la germana Bibiana Steinhaus y la mexicana Quetzalli Alvarado serán unas de las encargadas del VAR y la brasileña Edina Alves Batista será una de las auxiliares.

Las repercusiones de la designación de Frappart también se escucharon en México, donde personalidades del mundo del fútbol como el ex árbitro internacional Armando Archundia, que participó en Alemania 2006 y Sudáfrica 2010, han reclamado públicamente más presencia femenina en el arbitraje tras la fracasada experiencia de Virginia Tovar en febrero del 2004 cuando tuvo que abandonar la primera división mexicana por la negativa de los clubes a que les arbitrara una mujer.