El mercado de invierno fue de los "milenials". El Real Madrid le arrebató a Brahim Díaz (19 años) al Manchester City. Con la misma edad, el francés Jean-Clair Todibo recaló en el Barcelona para solucionar su problemas en la defensa, el Sevilla fichó al austriaco Maximillian Wober (21 años) y Lainez, con tan sólo 18 años, fue presentado en el Betis como el "Messi mexicano". Y, sin embargo, esa llegada masiva de jóvenes que entran directamente a la primera plantilla no ha conseguido retirar a los más veteranos, que han logrado, incluso, que cambie la mentalidad de los clubes, reacios hasta hace poco a prolongar los contratos más de una temporada en el momento que se sobrepasa la treintena.
Luka Modric, acaparador de premios con 33 años o Cristiano Ronaldo, capaz de lograr un traspaso multimillonario cuando, en buena lógica, debía comenzar a bajar su rendimiento, han marcado el camino. Los "abuelos" aún se sienten protagonistas en LaLiga. Es el caso de Jorge Molina (36 años), clave en la buena temporada del Getafe, o de Diego López (37), que lo ha jugado todo con el Espanyol. Y hay más casos. Borja Fernández (37 años) tiene como presidente en el Valladolid a Ronaldo Nazario, con el que compartió vestuario en el Real Madrid, y con la misma edad Gorka Iraizoz defiende la portería del Girona.
¿Cómo puede darse esta convivencia inusual? El doctor Antonio Escribano, experto en nutrición y medicina deportiva, tiene claro que tanto detrás de la precocidad en acceder al profesionalismo como en la prolongación de la carrera más allá de los 30 se encuentran las nuevas técnicas de entrenamiento y una alimentación más adecuada. "La nueva filosofía de entrenamientos, con unas actividades que se ajustan más al correcto funcionamiento de nuestro organismo y que no ejercen 'cargas' excesivas en nuestro cuerpo han sido clave. El entrenamiento antes era indiscriminado y ahora tiene una base científica", comenta a EFE.
Escribano une a esto una mayor preocupación en todos los clubes porque el jugador siga una correcta alimentación. "Ahora no hay excesos y todos tenemos claros los procesos de asimilación de alimentos que tiene nuestro cuerpo. Son muy importantes los niveles de oxidación de los alimentos y la forma que tiene nuestro cuerpo de aprovecharlos. Se da importancia a los antioxidantes". En su opinión, antes se hacían barbaridades y ahora hay una mayor conciencia en torno a los esfuerzos físicos. "Cristiano Ronaldo y Sergio Ramos ilustran que los cuerpos de los deportistas aguantan mucho más. Eso tiene que ver también con la evolución biológica del ser humano" y ha llevado a los clubes a cambiar su política de "no renovar a jugadores mayores de 30". "También antes encontrábamos a futbolistas como Di Stefano que hacían 5 kilómetros en un partido y ya nos parecía una proeza, pero ahora hay porteros que incluso llegan a los 4 kilómetros. Futbolistas como (Ngolo) Kante del Chelsea ilustran el desarrollo del cuerpo humano hacía un mayor aguante y resistencia física", añade.
De igual forma, el cambio en los entrenamientos ha propiciado la irrupción de jóvenes talentos. "Cada vez es menos raro ver a jóvenes de 16 o 17 años llegando hasta incluso a debutar con el primer equipo. Todo esto e debido a los nuevos métodos de entrenamiento, que los convierten en mejores atletas". El paradigma es Vinicius, que con 18 años no sólo es que aguante las embestidas de jugadores ya formados, sino que con su apabullante físico se ha convertido en la sensación de la Liga. "Hemos conseguido que la fuerza y la velocidad también evolucionen y puedan verse incrementadas, algo antes impensable. Además el cuerpo humano con una buena alimentación y un entrenamiento adecuados, llega a una mayor durabilidad de sus miembros, así como a mayores niveles de potencia y flexión". Una situación que ha provocado que, en LaLiga, cada vez tenga menos importancia la edad que marca el carnet de identidad.