Un antiguo árbitro de la primera división francesa revela en un libro los claroscuros de los jugadores y entrenadores, entre los que destaca al colombiano
Radamel Falcao (Mónaco), al que considera "un chico encantador", así como a
Samir Nasri (ex del Sevilla FC), Nabil Fekir (Lyon) y Hatem Ben Arfa (PSG), a los que critica duramente.
En 'Je suis l'arbitre masqué' ('Yo soy el árbitro enmascarado'), que publica este jueves la editorial Hugo Sport, el excolegiado, quien firma
bajo el anonimato la obra, cuenta los entresijos entre las cuatro líneas y relata sus relaciones con jugadores, entrenadores y dirigentes.
"Radamel
Falcao es un chico absolutamente encantador. Un modelo de buena educación y un líder ejemplar para sus colegas. Cuando un jugador con ese carisma indica el buen camino, todo el mundo le sigue y el partido marcha sin sobresaltos", confiesa en unos extractos difundidos hoy por el diario "Le Figaro".
El autor también elogia al meta y capitán de Francia
Hugo Lloris (Tottenham) y a
Jérémy Toulalan (ex Málaga, Lyon y Burdeos), así como al entrenador francés
Laurent Blanc (ex PSG) y al argentino
Marcelo Bielsa (ex Marsella y Lille), a quienes describe como "grandes señores" que no achacan sus fracasos a factores ajenos.
El colegiado, sin embargo, no tiene piedad para reprobar el comportamiento de los jugadores
Fekir y Ben Arfa.
Al primero lo tilda de
"mocoso de primera categoría" que solo se dirige a los árbitros para quejarse y que habla entre dientes cosas que no quiere que se entiendan, mientras al segundo lo considera "una plañidera que se queja cuando no tiene lo que quiere".
También tiene duras palabras contra otro de los considerados 'enfant terribles' del fútbol francés,
Sami Nasri (ex del Sevilla FC y actulmente sancionado por dopaje y sin equipo), a quien acusa de
intentar que el árbitro viva "un infierno".
En su diana está el presidente del Lyon, Jean-Michel Aulas, al que reprocha presiones antes de un importante encuentro, y el actual entrenador del Marsella, Rudi Garcia, quien, según la versión del árbitro, intenta que los hombres de negro vivan "una pesadilla" con sus continuas reclamaciones.