EFE4 min lecturaEl técnico también señaló que es duda la presencia en el equipo para este encuentro de dieciseisavos de final del brasileño Neymar, que ya se perdió el partido liguero del pasado domingo contra el Lyon, en el que el PSG sufrió la segunda derrota liguera de la temporada.
Emery aseguró que Mbappé, que se retiró en camilla del encuentro contra el Lyon tras sufrir un duro golpe con el portero Anthony Lopes, "quiere jugar" y se encuentra "bien". No obstante -puntualizó el técnico- "recibió un golpe muy fuerte y hay que analizar lo que dirán los neurólogos que van a examinarle para ver si es peligroso que juegue contra el Guingamp".
El protocolo médico de los clubes franceses establece que, tras sufrir este tipo de choques, los jugadores sean sometidos a exámenes neurológicos para determinar si tienen secuelas y en ese caso prescribir ausencias preventivas. El colombiano del Mónaco Radamel Falcao, por ejemplo, estuvo cuatro semanas de baja la pasada temporada por precaución neurológica tras haber sufrido un traumatismo.
En todo caso, Emery no se aventuró a precisar la duración de la ausencia de Mbappé, a menos de un mes del duelo de ida en el Bernabéu de octavos de final de la Liga de Campeones contra el Real Madrid.
En cuanto a Neymar, el entrenador aseguró que sufre una elongación y que, pese a que lo consideró "una pequeña lesión", hay que esperar a ver cómo se siente el futbolista para determinar si está listo para el duelo copero. Emery, en cualquier caso, descartó al italo-brasileño Thiago Motta, que sigue siendo tratado por los fisioterapeutas del club.
El entrenador reiteró que el brasileño Lucas Moura "no tendrá muchas opciones para tener minutos" esta temporada en el PSG, por lo que le invitó a salir en el mercado invernal de fichajes. Según medios franceses, el jugador tiene ofertas del Tottenham, Nápoles y del Betis.
Sobre la expulsión el pasado domingo de Dani Alves, Emery aseguró que el lateral brasileño "cometió un error". "Algunos futbolistas juegan con el corazón y otros con la cabeza, pero ambos son importantes. Dani es inteligente, tiene experiencia y juega con el corazón. Ha cometido un error y se lo dije", comentó. Sin embargo, el entrenador añadió que el árbitro "podía haber gestionado mejor el asunto" y haber mostrado solo cartulina amarilla al ex barcelonista, en lugar de expulsarle.
El jugador no parece arrepentirse de su excesiva reacción contra una decisión arbitral que le valió la roja y en una red social se quejó: "¿Desde cuando estar en desacuerdo es una falta de respeto? Si quieren culparme pueden. Tengo las espaldas anchas y un par bien puesto que me mantiene en pie".
Emery negó que su equipo se encoja en los grandes partidos y aseguró que el duelo contra el Madrid será "una buena oportunidad" para demostrarlo."Creo -dijo- que el equipo está bien preparado para dar ese paso".