El portugués Ricardinho arranca este lunes en Lituania, a sus 36 años, el que será su último Mundial de Fútbol Sala. El seis veces "mejor jugador del mundo", que se consagró en el Inter Movistar (2013-2020), asegura en una entrevista con EFE que cambiaría sus títulos individuales por ganar este Mundial.
El jugador del ACCS París reconoce que desde que se lesionó en marzo pasado su único objetivo ha sido el de llegar al Mundial de Lituania. Se lesionó gravemente en marzo el tendón largo de su pierna derecha y reconoce que, por primera vez, pasó por esa incertidumbre hasta que vio su nombre en la lista para el Mundial, ya que hay jugadores que vienen pisando fuerte en Portugal.
El combinado luso que dirige Jorge Braz acude a Lituania con la vitola de campeón de Europa en 2018, donde Ricardinho fue elegido mejor jugador del torneo. Aun así, el jugador reconoce que España o Brasil siempre son favoritas y no se olvida de otras como puede ser Irán.
Los lusos juegan hoy su primer partido en Kaunas contra Tailandia y Ricadinho insiste: "Queremos ir creciendo partido a partido".
- Pregunta: Su objetivo, salir de la lesión y jugar el Mundial.
- Respuesta: Aunque toques el cielo siendo el mejor no sé cuántas veces y ganar no sé cuántos títulos, yo tengo que seguir trabajando hasta que me retire. Sólo ahí, cuando te sientas en tu sillón, en casa, mirando a los trofeos y los vídeos compruebas que has hecho algo muy bonito en la página del fútbol sala.
Cuando me lesioné a principios de marzo, fueron meses muy duros, tuve que aceptar lo que el destino me dio, una lesión fuerte con 35 años. Decidimos, junto con la Federación (de Portugal), que la mejor manera de curarla era operar y desde entonces trabajamos juntos. Fue difícil, los primeros meses sin poder apoyar el pie, la movilidad y saber que ibas a quedar sólo con la movilidad de un tendón no con los dos (uno pegado al otro).
- P: ¿Y cómo fue el regreso a la selección tras la lesión?
- R: Es verdad que fue la primera vez que seguí el anuncio de la lista (la convocatoria de la selección de Portugal) con alguna atención, ya que habiendo trabajado solo, sabiendo que viene una nueva generación apretando fuerte, sabía que tenía que convencer muy bien a los entrenadores. Ahora estamos todos aquí con el corazón en la mano porque tenemos que hacer test todos los días, pero estoy muy contento y aquí estoy, disfrutando de mi último mundial.
- P: Cómo es la lesión que sufrió en marzo pasado.
- R: Me rompí el tendón largo de la pierna derecha, la parte exterior, que une por el tobillo. Y son dos tendones, uno termina por debajo del pie y el otro en el tobillo. El que pasa por debajo del pie se rompió y estaba cada uno para un lado, por lo que tuvieron que juntar un tendón al otro.
- P: ¿Cuál es su meta?
- R: Lo importante es trabajar, luego vienen los títulos. Lo que intento hacer no es centrarme en la meta final, intento trabajar mucho y divertirme, y que la gente quiera volver a ver fútbol sala.
- P: Ricardinho posee seis títulos de mejor del mundo, ¿los cambiaría por ganar el Mundial con Portugal?
- R: Sin duda, lo cambiaría todo. Yo creo que tocar el cielo, el máximo del fútbol sala es ganar el Mundial con tu selección. Además, yo tengo muchos títulos ya, podemos cambiar alguno por un título mundial (risas).
- P: Concentración de un mes para preparar el Mundial de Lituania.
- R: Las primeras semanas fueron de trabajo muy físico, lo que estamos haciendo es trabajar el físico e ir creciendo partido a partido. Tomás Paços, Zicky (Sporting) Afonso (Benfica),... Jugadores jóvenes que están trabajando fuerte y algunos (los del Sporting) campeones de la Champions con su club. Lo que queremos es hacer sonar el nombre de Portugal todos juntos, somos un deporte colectivo.
- P: Selecciones favoritas.
- R: Yo siempre pongo a España ahí, como Brasil, como Irán (que nadie la valora tanto). Colombia fue un Mundial agridulce y nos faltó esa experiencia para competir en unas semifinales (fueron eliminados por Argentina). Y perdimos en los penaltis el tercer y cuarto puesto. Vamos a ir paso a paso, respetando a todos los rivales. Sabemos que hay selecciones muy buenas.
- P: Portugal, vigente campeona de Europa 2018 donde Ricardinho fue el mejor jugador.
- R: Sí, pero eso es pasado. Nosotros tenemos que disfrutar del momento. El pasado es para los museos, el deporte no para, una constante evolución. ¿Ahora nos miran con más respeto? Porque ahora ya no es sólo la Portugal que juega bien, sino que también compite bien.
- P: ¿Con un ojo en la selección de España?
- R: Ha cambiado mucho, ya no tiene nombres tan altisonantes como antes, Miguelín, Fernandao, jugadores que tenían otro tipo de experiencia, pero la selección española tendrá más movilidad, jugadores con más electricidad y el uno contra uno de Adri, el gol de Raúl Gómez -que está jugando muy bien-, la experiencia de Ortiz, los porteros son muy buenos. Es una selección que siempre es muy completa. Si jugáramos contra España yo le diría a mi entrenador: vamos a tener cuidado, que son muy buenos, que tienen experiencia y juegan como equipo.
- P: ¿Cómo va la Academia Ricardinho-Ortiz?
- R: Ahora estamos parados por el tema covid, pero sí tenemos algunos países pendientes de visitar. Esté yo donde esté y Ortiz donde esté, esa Academia (dedicada a fomentar el fútbol sala entre los niños) siempre va a funcionar porque lo más importante es que queremos formar y ayudar y dar al fútbol sala lo que nos ha dado a nosotros.
- P: ¿Eurocopa de Ámsterdam 2022?
- R: Lo que pido es que me dejen disfrutar de este momento en la selección y centrarme en este mundial, que es mi último mundial, eso sí está claro. Sé que no voy a estar en mi mejor nivel, porque es casi imposible venir de una lesión como la mía y tras cinco meses estar al nivel que he acostumbrado a la gente, pero yo soy exigente conmigo y voy a trabajar día a día para llegar a mi mejor nivel.
- P: La primera Euro femenina de fútbol sala fue en su localidad natal, Gondomar, y la jugaron Portugal y España. Mensaje para el fútbol sala femenino.
- R: Fue y es un honor pelear por los derechos del fútbol sala femenino. El deporte es para todos. Ese primer europeo fue muy bonito, las jugadoras se sintieron muy valoradas por todo el mundo. Creo que es algo que se merecen y que todos soñamos. La evolución cuesta, sí, pero hay que ser pacientes.