El equipo ciclista Astana se ha retirado de toda competición hasta el 20 de marzo "para proteger la salud de corredores y personal" ante la expansión del virus COVID-19. "Por supuesto que hubiéramos preferido participar en las próximas carreras, pero por ahora la seguridad es lo primero. No ha sido una decisión fácil, pero tenemos que proteger a la familia del ciclismo así como a nuestras propias familias en casa", declaró hoy el mánager general del equipo, Alexandr Vinokurov.
Las pruebas que debían disputarse en ese periodo, aunque todas ellas están en suspenso por el coronavirus, son la Strade Bianche, la París-Niza y la Tirreno-Adriático, en Italia.