La selección española de baloncesto se presentó este viernes de forma oficial antes de iniciar su preparación para el Europeo que se disputará en
Finlandia,
Israel, Turquía y Rumanía, y se abonó al sentimentalismo para ir a por el oro: "Teamo" es la palabra mágica de los hombres de
Sergio Scariolo.
Juan Carlos Navarro, el capitán y hombre con más partidos de la historia de la selección española, fue el encargado de sacar a la luz el mensaje icónico para el Europeo.
El jugador del Barcelona, que
podría disputar su último torneo con la selección, retiró un balón pegado a la palabra "Team" en un panel detrás del escenario y apareció el mensaje que se repitió en un acto en el que sobre todo se respiraba unión. Debajo de la pelota, había una "o" escondida y del "Team" se pasó al "Teamo" en un momento.
Todos los jugadores estuvieron presentes en la presentación salvo
Sergio Rodríguez, que apareció al final para atender a los medios de comunicación. Llegó un poco tarde.
Volvía de Rusia después de firmar su contrato con el CSKA de Moscú.
Acompañados del presidente del
Consejo Superior de Deportes (CSD),
José Ramón Lete, y del presidente de la Federación Española de Baloncesto (FEB),
Jorge Garbajosa, uno a uno fueron desfilando por una pasarela dirigida por el exjugador
Fernando Romay, que, como casi todos, apeló al grupo y al sentimiento que genera la selección española desde hace más de una década.
Durante más de diez años, la generación de
Pau Gasol y de Juan Carlos Navarro ha ido acumulando títulos hasta convertirse en el mejor equipo español de la historia. España comenzó a crecer con aquella plata de los
Juegos Olímpicos de Los Ángeles 1984 y la generación nacida en
1980 se encargó de superar a sus mayores.
Así lo recordó
Lete, que apeló a un pasado todavía presente y pidió a los jugadores de
Scariolo que intenten continuar con la buena racha. Como si fuera en un "buen concierto", pidió más minutos de buena música y se mostró seguro de que la selección española regresará del Eurobassket con algún éxito bajo el brazo.
Scariolo fue más técnico. Habló sobre el cambio generacional que se avecina en la selección. Aunque aún continúan varios de los nombres que iniciaron todas las gestas de España en Mundiales, Europeos y Juegos Olímpicos, recordó que hay que ensamblar a su equipo.
"Tengo
muchas caras nuevas, mucho nuevo cuerpo técnico. Siempre nos hemos rearmado y hemos encontrado una química eficaz. Ese es el reto de ahora, volver a rearmarme. Un tornado además se ha llevado posiciones (
Nikola Mirotic,
Rudy Fernández y
Felipe Reyes). Es un reto intentar hacer algo que se acerque a lo viejo, pero por supuesto nuevo porque hay protagonistas diferentes", comentó.
Scariolo no apeló a las emociones. Es práctico. Piensa en baloncesto. Pero sí lo hizo Garbajosa. Dio un discurso efectivo, sólo interrumpido por la anécdota del día, cuando uno de los balones decorativos del panel donde estaba el escenario cayó al suelo. Pero Garbajosa no se despistó. Lanzó su mensaje sin problemas.
"Con un palmarés así empieza a ser un poco aburrido destacar valores como el trabajo y la constancia. Yo considero más importante los sentimientos, esto es lo que le caracteriza a este grupo de jugadores. En estos tiempos todos los equipos tienen un gran nivel, pero nosotros tenemos sentimientos que nos mantienen ahí arriba todo el tiempo", dijo.
Esa es la palabra con la que España comenzará el campeonato. Los sentimientos definen perfectamente a un grupo de profesionales que, sobre todo, son amigos. De la ÑBA se ha pasado al "
Teamo". Toda una declaración de intenciones. El baloncesto español tiene ganas y hambre de triunfos. Y los lograrán con cariño.