Francisco Salas4 min lecturaUna de las grandes pruebas del mundo del 'motorsport' tiene lugar este fin de semana en Le Mans, con la disputa de las 24 horas del trazado de La Sharte, donde año tras año los fabricantes prueban la resistencia y velocidad de sus modelos, en una cita que es un emblema para todos los pilotos, que independientemente de donde provengan quieren pasar por allí en algún momento. Un ejemplo de ello es Fernando Alonso, que llegó a lo más alto en 2018 y 2019, a los malos de un Toyota, dejando algunos momentos para la posteridad, como un mítico 'stint' nocturno, que pese a sus muchísimos éxitos, se tiene uno unos de los picos de su carrera.
Por esa mística y esa magia que hay alrededor, todos quieren estar en la carrera, incluso aunque no vengan de los coches, como es el caso de Valentino Rossi, la grandísima leyenda de MotoGP, que este año está corriendo en la categoría GT3, pilotando un BMW M4 LMGT3 de equipo 'Team WRT', con el que forma un binomio desde hace dos años, a partir del cual busca el éxito sobre cuatro ruedas, y tiene como objetivo estas 24 horas de Le Mans, aunque antes pasó por la GT World Challenge Europe.
El problema, es que es tan sumamente conocido y carismático, que ha desatado la locura en la ciudad, hasta el punto de que en la firma de autógrafos tuvo problemas ante la afluencia de gente, y se teme que todo vaya a peor a lo largo del fin de semana, con especial preocupación en el desfile de pilotos de hoy viernes. Por culpa de esta tensión, el equipo de Rossi se ha visto incluso obligado a sacar un comunicado pidiendo sosiego al público, en pro de que todo se pueda desarrollar con normalidad, y el de Tavullia no tenga ningún problema.
"La atención que despierta Valentino es una locura, obviamente, y así lo hemos visto durante los tres últimos años. Y no ha disminuido en los últimos tres años. Eso significa que hay obligaciones en términos de organización antes de cada evento, y antes de cada actividad. Nuestro enfoque, desde el momento en que todo está planeado y organizado de antemano, es que la atención extra, la locura, no impacte en la forma en que opera el equipo".
"Valentino siempre dedica tiempo extra a sus fans. Incluso cuando no hay sesiones de autógrafos programadas es capaz de tomarse un tiempo con sus aficionados, y lo ha hecho todos los días en los circuitos en los que hemos estado en los últimos tres años. Cada aparición transcurre sin contratiempos gracias a la planificación y la organización".
"Como equipo, tenemos dos prioridades: la seguridad y tratar de complacer al mayor número posible de aficionados. Cuando estas actividades se organizan con precisión, podemos complacer a más gente y hacerlo de forma segura. Esperamos que los organizadores hayan tomado nota de lo ocurrido en la sesión de autógrafos de ayer, y tomen medidas para garantizar la seguridad de todos los implicados en el desfile de pilotos del viernes".