Marta Sánchez4 min lecturaLa carrera al sprint del Gran Premio de Barcelona no ha sido lo esperado para algunos de los pilotos españoles. Jorge Martín tenía una oportunidad de oro para sentenciar el mundial, pero Pecco Bagnaia ha sacado todas sus fuerzas para llevarse la victoria en el sprint y así seguir vivo en la pelea por el título, que se decidirá este domingo.
Pero ha habido noticias peores para los pilotos españoles, como el abandono de Pedro Acosta y el flojo ritmo de Marc Márquez, muy relacionados entre ambos. En las primeras curvas el ilerdense y el murciano se tocaron en un adelantamiento, que forzó al piloto de KTM a abandonar la prueba. Un incidente del que se han pronunciado ambos pilotos, con especial furia Acosta, que fue el más perjudicado y no duda en señalar al ilerdense como culpable.
Visiblemente molesto, el piloto murciano explicó sus sensaciones tras el choque con Márquez. "Es difícil decir algo porque al final yo era el que estaba delante. Entonces, no era necesario en la primera vuelta hacer esto porque al final se ha tirado como si no hubiera nadie. Al final estábamos Martín, Bastianini, Bagnaia y yo. Las carreras son así, agua pasada y centrados en mañana ya" aseguró Acosta.
Además explicaba su frustración, de la que Márquez tiene gran parte de culpa. "Ha sido un cúmulo de cosas. Hacía tiempo que no se salía un carenado así en MotoGP. Entonces, hay que entender qué ha pasado y ya está. Estoy cabreado, claro que sí, porque estábamos siendo competitivos. Creo que hubiera sido un buen día, pero de creencias no va la cosa. No me han enseñado a llorar"
"Marc ha entrado como si no hubiera nadie, pero el toque tampoco ha sido tan grande. Un toque, nos vamos los dos fuera, volvemos y ya está y aquí nadie se entera de nada. Ni le puedo echar la culpa a él, ni me puedo echar la culpa a mí, ni le puedo echar la culpa a nada. Hay que aceptarlo y ya está" concluyó el de KTM, que centra todos sus esfuerzos en la carrera y en terminar la temporada de la mejor forma posible.
Por su parte, el ilerdense no ha querido entrar en ninguna guerra absurda. Sabe que no tenía el ritmo suficiente y que el incidente con Acosta ha sido una cosa normal en un contexto de carreras. "El toque con Acosta ha sido un lance de carrera, pero si alguien lo podía evitar era yo. Él no me ha visto en ningún momento. Evidentemente, yo pensaba que ya había acabado todo el adelantamiento. Es verdad que en esa curva, cuando entras por fuera, haces el ápice de la curva en la mitad; cuando entras por dentro, te vas más largo y luego vuelves" ha explicado Marc tras el sprint, dándole la razón a Pedro, pero zanjando rápido el tema y sin ninguna rencilla.