Pedro Acosta y su final no deseado en KTM

Un frenazo para su futuro sería lo menos malo que le podría pasar a Pedro Acosta en 2025. Y lo peor, quedarse sin asiento para pilotar en MotoGP. Y, ahora mismo, nadie se atreve a pronosticar nada, porque el desastre financiero que hay en torno a KTM es de tal magnitud que cualquier cosa podría pasar.

Una deuda de casi 3000 millones de euros y cientos de puestos de trabajo en peligro ha provocado un auténtico terremoto en la categoría reina del motociclismo. Y tras la brillante campaña que había firmado el de Mazarrón en su estreno en la elite, eran muchos los que esperaban con ansia la llegada del 2025 para ver cuánto podía crecer más.

Sin embargo, su representante, Albert Valera, ha confesado que su final en el equipo austriaco está cerca por muy feliz que haya sido el piloto con ellos. Y es que, entre otras cosas, se han sentido engañados cuando el pasado mes de mayo firmaron su renovación con KTM para competir las dos próximas temporadas.

Un acuerdo en el que les hicieron creer que tenían suficientes recursos detrás para poder hacerle campeón. "Nadie nos avisó de esta posibilidad cuando firmamos el contrato en mayo, se nos vendió que KTM era un gigante con un enorme músculo financiero, para nosotros ha sido una sorpresa absoluta", ha subrayado el manager del piloto murciano.

En esta intervención en el Podcast 'Por Orejas' de Motorsport.com, Valera, quien también dirige las carreras de Jorge Martín y Aleix Espargaró, no se mordió la lengua a la hora de hablar del asunto: "No ha sido una noticia fácil de digerir. Por suerte, por lo que nos dicen, el proyecto va a seguir en MotoGP, con lo cual no peligra tener una moto para el próximo año, lo que sí que nos preguntamos es en qué condiciones vamos a poder competir. En mayo firmamos un contrato con un proyecto ganador, con una empresa que venia de generar decenas de millones de beneficios y con un mensaje claro de que estaban en posición de fortaleza para poder luchar contra el denominador actual en MotoGP, que es Ducati".

En este sentido, el representante de Pedro Acosta confirma que tanto él como el piloto están muy angustiados y estudiando su futuro: "Sin embargo, a día de hoy esto no es así. De golpe, en seis meses, ha cambiado todo y nos preguntamos qué ha ocurrido. Es algo que sí que nos preocupa y negar lo evidente sería absurdo. Creo que hay que reconocerlo y ser honestos, y obviamente, tanto a Pedro como a mí, como a su familia y a su entorno, nos preocupa la situación actual de KTM".

Y sabiendo que no quedan asientos libres ya en el resto de equipos, la solución sólo es una. Eso sí, ha dejado claro que han perdido la confianza absoluta: "Yo entiendo que Pit, probablemente, tampoco sabía de la situación en la que estábamos cuando negociamos el contrato con él en mayo. Yo creo que todo el departamento de carreras de MotoGP es víctima de una mala gestión de KTM. Creo que hay que hacer un ejercicio difícil de hacer, pero que se debe hacer, que es confiar en lo que nos dicen. Digo que es difícil de hacer porque obviamente lo que es la compañía KTM, en su momento, nos trasladó que eran un gigante y que estaban en posición de hacer frente a Ducati, y no ha sido así. Ahora, todo lo que nos digan lo ponemos en cuarentena. Hay que hacer ese difícil ejercicio de creer, confiar y no anticiparnos a los acontecimientos".

Por último y sobre la búsqueda de un nuevo equipo, como Ducati, ha sido tajante: "Pensar ahora en romper un contrato para el 2025 es muy difícil. Creo que no tenemos que anticiparnos a los acontecimientos. Uno puede romper el contrato cuando hay un incumplimiento por parte de la otra parte. De momento KTM no ha hecho ningún incumplimiento de contrato. Diría que para el 2025, de momento, todo sigue igual a no ser que la situación empeore y se nos comunique por parte de KTM. Es verdad que hablé con Carlos Espeleta y todas las fábricas me han contactado preguntándome cómo está Pedro, deseándome que esta situación no le afecte, me han dado el apoyo y nos han deseado lo mejor. Y sé que todas las fábricas, en el momento en que estemos en una posición que debamos buscar una alternativa, estoy seguro que también estarán abiertas a ayudar a Pedro. Pedro es un diamante, tiene 20 años, ha demostrado ya muchísimo y a cualquier fábrica le haría ilusión contar con sus servicios".