Francisco Salas3 min lecturaEl Gran Premio de la Emilia Romaña de MotoGP, el segundo consecutivo en Misano, trajo consigo una tamaña sorpresa, provocada principalmente por la caída de Pecco Bagnaia, quien se fue al suelo en la vuelta 21, cuando iba tras Jorge Martín, quien luchaba por mantenerse en cabeza. Esto dio alas al de Pramac, que parecía encaminarse a un nuevo triunfo y una renta de 29 puntos sobre Bagnaia, sin embargo, al italiano le hizo un favor su compañero Enea Bastianini, quien acabó ganando la carrera tras un adelantamiento muy agresivo que casi saca de la pista al madrileño y ha generado mucho debate en el paddock.
Y es que el propio Martín fue el primero en posicionarse en contra de una acción que él ve muy por encima de los límites tolerables, en la misma línea que su amigo Aleix Espargaró, quien destacó que esto siembra un feo precedente y que puede acabar con todos los pilotos intentando este tipo de pasadas tan agresivas, hasta que ocurra algo grave. Y es que la 'Bestia' buscó frenar muy tarde, hasta el punto de que se apoyó en la GP24 del 89 y casi acaba con sus huesos en la grava.
Sin embargo, hay otros que no lo tienen tan claro, sobre todo Pedro Acosta. El rookie del GasGas ha defendido a quien va a ser su compañero de marca el año que viene, destacando que "todos los grandes" de la historia de MotoGP tienen en su currículum adelantamientos de este tipo, más aún siendo el momento y el lugar que era. "Todos los grandes pilotos de la historia han hecho adelantamientos así y más siendo en la última vuelta y en un circuito en el que no se puede adelantar". Eso sí, tampoco escondió que si hubiera sido él el afectado es probable que sus palabras fueran diferentes.
Con la victoria del 23 lo que se queda es un mundial entre 4, puesto que Martín lidera con 24 puntos sobre Pecco, mientras que sobre la otra Ducati del Lenovo tiene 59, tan solo uno menos que con Marc Márquez, cuarto a 60. Esto quiere decir que hay cuatro pilotos a una distancia menor de dos grandes premios, lo que puede hacer que pase cualquier cosa. Eso sí, todo puede pasar, más aún en Indonesia, donde se corre esta semana, un lugar de infausto recuerdo para Jorge Martín, pues se cayó el año pasado cuando tenía medio mundial en la mano.