La carrera 'sprint' del Gran Premio de Australia de MotoGP disputada en el circuito de Phillip Island ha provocado 'microinfartos' de todos los colores. Un sinfín de caídas y, al final, un podio con dos pilotos españoles: Jorge Martín y Marc Márquez. Sin embargo, pese a su 'pole position', el madrileño sabe que tendrá que lidiar duramente mañana domingo con su compatriota.
Al mismo tiempo, el piloto catalán reconocía su error en dicha jornada y sus previsiones para la carrera definitiva: "Hoy me he complicado la vida. Cuando salgo atrás hago primeras vueltas en las que dices ‘¿cómo lo ha hecho?’ Y hoy he hecho una primera vuelta en la que digo ‘¿cómo lo he hecho?’, pero la verdad es que ha sido un pequeño error, que por el punto de curva y el viento cómo afectaba, se ha convertido en un gran error".
En este mismo sentido, el de Cervera ha tratado de explicar lo ocurrido en la pista: "No he calculado bien la manera de frenar esa primera curva para desenganchar todos los dispositivos, porque hay que frenar muy agresivo y tampoco esperaba que Martín frenara tan agresivo, algo a lo que siempre el piloto que viene por detrás tiene que anticiparse".
Por último, ha subrayado qué es lo que le ha faltado para ser campeón: "Esas primeras vueltas tan explosivas de Jorge son las que me faltan a mí, pero mañana habrá que gestionar muy bien el neumático trasero si no quieres pagarlo al final".
Mientras tanto, el piloto madrileño, vencedor de su enésima carrera 'sprint' ha manifestado estar "muy contento" de cómo han "gestionado todas las situaciones". Sobre todo, porque no se esperaba ir tan sobrado: "En carrera me esperaba otra historia, con Marc cerca y los dos con un ritmo muy similar, pero he podido tener pista libre, meter tres segundos y medio y a partir de ahí he gestionado hasta el final", recordó el vencedor.
En lo que a sus posibles rivales para la carrera larga se refiere, no dudó en señalar a Marc Márquez: "Está claro que Marc es el piloto más rápido junto a mí, yo esperaba que los dos pudiéramos escaparnos y creo que así hubiera sido una carrera muy diferente, pero ha tenido un problema en la salida".
También dos españoles fueron protagonistas en el circuito de Phillip Island pero en sentido negativo. Y es que tanto Maverick Viñales como Pedro Acosta se fueron al suelo de manera escalofriante. El primero tras ser completamente arrollado por el italiano Bezzecchi y el segundo por una maniobra suya que terminó costándole un buen revolcón y que le hace ser duda hasta última hora para competir en el Gran Premio de Australia.