El sprint del Gran Premio de Barcelona ha dejado sensaciones agridulces para los aficionados españoles. Aleix Espargaró y Alex Márquez han hecho una gran carrera y han logrado imponerse a una salida complicada para conseguir un resultado final ocupando la cuarta y quinta posición. Sin embargo, ni Jorge Martín, ni Marc Márquez ni Pedro Acosta han tenido la misma suerte.
'Martinator' podría haber sentenciado el mundial y haberse proclamado campeón del mundo, pero Bagnaia se ha llevado el triunfo en el sprint y deja la resolución del mundial para el domingo. 19 puntos separan a Pecco de Martín, por lo que el español necesita 7 puntos en la carrera para convertirse en campeón del mundo en la categoría reina, mientras que el italiano se acoge a un fallo del '89' para conseguir su tercer título.
Pero peor ha sido el sprint para Marc Márquez, que no encuentra el ritmo en este último Gran Premio de la temporada y que pierde la esperanza de alcanzar el podio en la clasificación definitiva del mundial.
El piloto de Gresini no está encontrando su mejor nivel en el GP de Barcelona, un circuito que le cuesta especialmente. En la carrera al sprint ha finalizado en la séptima posición, por lo que asume su derrota en este último fin de semana. "De momento, soy pesimista. A ver si mañana podemos mejorar un poco, pero, de momento, a distancia larga, si hoy la carrera en vez de 12 dura 24 nos pasan cuatro o cinco más" explicaba el piloto de Cervera al terminar la carrera.
"Siempre quieres que la última carrera acabe bien, pero no depende el sabor de boca de una carrera u otra. Sabemos que en este circuito históricamente, siempre he sufrido y este fin de semana no está siendo diferente" aseguró Márquez, confirmando sus problemas en Montmeló.
A pesar de que el ilerdense asegura que su incidente con Acosta no ha sido definitivo en su flojo resultado este sábado, reconoce que la culpa del toque es suya, a pesar de haber sido un incidente de carrera. "El toque con Acosta ha sido un lance de carrera, pero si alguien lo podía evitar era yo. Él no me ha visto en ningún momento. Evidentemente, yo pensaba que ya había acabado todo el adelantamiento. Es verdad que en esa curva, cuando entras por fuera, haces el ápice de la curva en la mitad; cuando entras por dentro, te vas más largo y luego vuelves. Nos hemos encontrado en ese punto, pero Acosta tiene razón, si alguien podía haberlo evitado... él no ha visto nada" explicó Marc, haciendo 'autocrítica' y buscando aprender de estos errores para la carrera del domingo.