El mundial de MotoGP está en unas semanas de doblete, y es que tras disputarse el Gran Premio de los Países Bajos en Assen, donde Pecco Bagnaia dio una exhibición, esta semana la caravana viaja a Sachsering, el jardín de Marc Márquez, para el GP de Alemania. Pero mientras en la pista la acción es intensísima, fuera de ella no lo es menos, y es que el baile de pilotos, marcas, rumores y demás, no cesa de cara a la parrilla de 2025, que va tener poco o muy poco que ver con la estamos viendo este año.
Tras dos campañas con los cambios muy justos, salvo alguna pequeña hecatombe como la salida de Marc Márquez de Honda, no habíamos tenido movimientos que de verdad giraran la aguja del certamen, al menos no de la forma en la que lo van a hacer los últimos. Quitando lo de Marc al Lenovo, hay que destacar que ahora Aprilia tiene dos nuevos pilotos, y uno de ellos es quien lidera el mundial actualmente, Jorge Martín, que estará con Marco Bezzecchi. O que KTM se ha montado un 'dream team' con Acosta, Binder, Bastianini y Viñales. Incluso el equipo campeón de 2023, el Pramac, correrá con Yamaha, dejando atrás la histórica y exitosa unión con Ducati. Y lo que está por venir no es menos intrigante.
El mundial de Superbikes ha sido siempre el hermano pequeño del de MotoGP, una salida para pilotos que se quedaban sin moto, como Remy Gardner o Álvaro Bautista, y no ha tenido la misma prensa ni seguimiento. Pero hay talentos que se han forjado en él, y siempre ha estado la duda de "y sí llegaran a MotoGP". Ese es el caso de Toprak Razgatlioglu, campeón en 2021 y quizá el más talentoso de la parrilla.
El turco ya dijo que su idea era ya estar el año que viene en el paddock de MotoGP, y aunque tiene contrato con BMW, espera poder cambiar de aires. El 54 ha reconocido que si no es este año, será en 2026, pero que hay equipos con los que está "reuniendo y hablando", aunque todavía no hay "ningún acuerdo oficial" y ahora mismo lo deja todo "en manos del tiempo". Lo que no esconde es que su manager está hablando con tres marcas por separado, y que una de ellas podría ser Yamaha, que ahora tiene más huecos. Lo que está claro es que si consigue convencer a BMW, es un movimiento que se va a dar, porque lo tiene más que claro. "En temporadas anteriores me llegaron ofertas de MotoGP, pero entonces no era tan serio. Ahora me quieren diferentes equipos".