Jorge Martín sufre el cambio en Japón

Jorge Martín llega al Gran Premio de Japón con la estrategia muy clara y la comodidad de ir primero en el Mundial, pero sabe que es muy distinto a cuanto arrasó en 2023 y es posible que no pueda ser tan rápido como en aquel momento, aunque ahora sea más completo

Jorge Martín sufre el cambio en Japón
Jorge Martín y Pecco Bagnaia en la rueda de prensa previa al GP de Japón de MotoGP - @MotoGP
Francisco SalasFrancisco Salas 3 min lectura

El gran nombre del Mundial de MotoGP es ahora mismo el del líder, Jorge Martín, que ha llegado a las últimas cinco citas de la temporada, con 187 puntos en juego y 21 de renta sobre su gran rival, Pecco Bagnaia, y con los dos siguientes, Enea Bastianini y Marc Márquez, mucho más lejos a 75 y 78, respectivamente. Y por eso mismo, los dos parecen ahora mismo los únicos contendientes al título, algo que ya sucedió en 2023, cuando el turinés se hizo con el cetro en Valencia, tras un tremendo tramo final de campaña donde se repartieron el liderato hasta el final, algo que van camino de hacer otra vez.

Pese a todo, Martín ha reconocido antes del Gran Premio de Japón, que aunque sea "difícil", si hay oportunidades lo pueden hacer y si alguien puede son ellos (Bastianini y Márquez), "sin duda". "Creo que es algo difícil, pero por el momento creo que está más entre Bagnaia y yo, es fantástico para mi estar luchando con un campeón como él". Por su parte, él se siente "bien" y va tratar de ganar. "Daré mi cien por cien como siempre. Creo que soy un piloto distinto al de la temporada pasada. Fui fuerte y quizás algo más rápido la temporada pasada, pero quizás ahora sea más completo".

Repetir lo de Indonesia

Más allá de todo eso, Martín viene de un GP en Indonesia que fue "increíble", ya que tras caerse en la sprint ganó el domingo arreglando el desaguisado, pero ahora el objetivo es claro, igualar 2023 en Japón y para eso lo va a dar todo. "La temporada pasada venía detrás, trataba de atacar y gané el sprint y la carrera del domingo. Pero creo que esta vez será distinta. Será dura, veo que el tiempo es imprevisible y será bastante difícil, un gran reto sin duda".

Aunque también opinó sobre la posibilidad de que la lluvia haga acto de presencia, algo que ya le jugó una mala pasada en Misano y que ha demostrado que no es su especialidad, pero ha aprendido la lección. "Creo que es todavía pronto para pensar en eso. Si llueve, lo importante para mí es centrarme en dar lo mejor; no quiero pensar demasiado en eso ahora, sino en mi rendimiento y hacerlo lo mejor posible". Aunque también mira más allá, porque quedan cinco carreras y "no es momento de pensar en otras cosas que no sean ganar puntos", y hacerlo en cualquier situación y dar lo mejor de él en todo momento.