El Gran Premio de Malasia dejó a Jorge Martín sin poder celebrar su primer título mundial y a Bagnaia con serias opciones de levantarlo en Montmeló. Veinticuatro puntos separan al español del italiano, por lo que todo es posible en tierras catalanas.
Pero el triunfo de Pecco no fue lo que más impresionó al madrileño en el último Gran Premio, sino un piloto con el que todavía no había coincidido en la pista: Andrea Iannone.
El italiano le dijo sí a Valentino Rossi para sustituir en Malasia al lesionado Fabio Di Giannantonio en el equipo VR46 Ducati. Y volvió a demostrar que no ha perdido su instinto. Tanto que, según ha confirmado el propio piloto, recibió unas palabras muy especiales: “Me escribió Jorge Martín el sábado y me dijo: 'He visto tus datos tío, como pilotas'. Y me hizo mucha ilusión. Me he dado cuenta de que hay puntos en los que estoy muy parejo con otros pilotos de Ducati, el problema es que aún no sé dónde debo frenar, no tengo referencias de cuánto puede frenar la moto, no uso a tope la goma, ni los frenos ni la aerodinámica y, sobre todo, físicamente no puedo frenar fuerte. Y estas son cosas que se aprenden sobre la moto, no se entrenan en casa. La SBK no tiene nada que ver con esta moto”.
No obstante, ha confesado que, después de cinco años sin probarse en un Gran Premio de MotoGP, sufrió las consecuencias durante y después de la carrera: "Estoy cansadísimo. A la quinta vuelta no conseguía ya tenerme en la frenada con los brazos. Fue una prueba de supervivencia. Llegó un momento en el que hacía una vuelta rápida, empujando, una más lenta, y así hasta el final… Pero el objetivo era terminar la carrera y, al final, creo que he hecho 15 segundos menos que Bautista el año pasado con una moto casi igual. Pero mi objetivo debe ser ése, no compararme con Bagnaia”.
De esta forma, Iannone terminó radiante de felicidad: "Estoy muy contento y me he divertido mucho. Marcho feliz porque sé que puedo ser aún veloz. Esto es lo que me interesa, lo saben todo los que han visto los datos y esto es bonito. No debía hacer tonterías, debía terminar la carrera y creo que la velocidad es bastante buena".
El español Jorge Martín (Ducati Desmosedici GP24) va a llegar a la última carrera de la temporada con la opción de proclamarse matemáticamente campeón del mundo de MotoGP con una nueva victoria, que sería la octava de la temporada, en la carrera 'sprint' que se disputa todos los sábados.
Cancelado el Gran Premio de la Comunidad Valenciana por la situación catastrófica provocada por la DANA, el circuito 'Barcelona-Cataluña' de la localidad de Montmeló acogerá el último certamen del año. Y será entonces cuando se decida la lucha entre Jorge Martín y el italiano Francesco 'Pecco' Bagnaia (Ducati Desmosedici GP24).
En Sepang el italiano logró triunfar y mantener la emoción hasta el final, pero ahora deberá jugársela todo a una carta en la sprint para mantenerse con vida en la última carrera. Ahora están a 24 puntos de diferencia en la tabla y, entre quedar el primero y el segundo el sábado hay tres puntos de diferencia, 12 frente a 9 respectivamente.
De esta manera y sabiendo que ganar el domingo sólo te permite sumar 25 puntos, muy mal lo tiene que hacer el español para no salir campeón en tierras barcelonesas.