Jorge Martín va a recordar para siempre el 2024 como el momento en el que cumplió su sueño, cuando se alzó con el título de campeón del mundo, un año después de haber sido subcampeón en la última carrera, y además, haciéndolo a lo grane, desde un equipo satélite y tras todas las dificultades propias de pelear contra un gigante como Ducati. Y es que el madrileño recibió un golpe del que casi no se levanta cuando no fue elegido para dar el salto a la escuadra oficial y acabó firmando, con medio calendario por disputarse, por Aprilia para la siguiente temporada.
Los de Borgo Panigale acabaron decidiendo darle el asiento a Marc Márquez, pese a que en ese momento el 89 iba líder de la general sobre Pecco Bagnaia y Marc estaba muy lejos, aunque eso sí, con una moto un año más antigua. Esto generó una corriente de dudas al respecto de si iba a poder en los muchos meses que quedaban pelear en igualdad de condiciones con Pecco, algo que al final se demostró que no fue un problema, ya que hasta la última carrera la marca apostó por los dos, sin ningún tipo de favoritismo.
Sin embargo, el madrileño ha desvelado en el podcast de Nude Project que desde la marca italiana las cosas no se hicieron nada bien con él, y cuando estaba todo acordado y solo faltaba la firma, en cuestión de dos días todo se desvaneció, pero cuando estaban "hablando de números", e incluso le habían felicitado desde Ducati por la firma, todo se fue al garete en dos días, cuando dejó de recibir llamadas y el elegido acabó siendo el seis veces campeón del mundo de MotoGP.
En el mismo programa, Martinator ha tenido que responder que quien es el piloto más talentoso que ha visto jamás, y aunque su primer instinto ha sido responder Marc Márquez, ya que cree que es a nivel deportivo, "el mejor de la historia", ha recalcado que no ha podido verlo en su mejor momento. Entonces ha sido más 'exótico', confirmando que el mejor que ha visto en cuanto a habilidad es el turco Toprak Razgatlioglou, dos veces campeón de Superbikes.
Del que ha recordado una anécdota, cuando en unos tests de la Red Bull Rookies Cup en mojado, les pasaba a todos sus compañeros de generación "por fuera, como si fuera en seco". Una muestra del talento puro del otomano, que sueña con dar el salto a MotoGP en el futuro próximo.