El Mundial de MotoGP vivió en Jerez una de sus mejores carreras de los últimos años, sobre todo debido a lucha final entre el ganador, Pecco Bagnaia, y un renacido Marc Márquez, quién tras pasar una larga y tumultuosa etapa final en Honda, este 2024 ha cambiado de aires y está a lomos de una Ducati en el equipo Gresini. Solo tiene una pega, y es que el equipo que dirige Nadie Padovani, la mujer del malogrado Fausto, tiene las motos de 2023, más concretamente las que llevaba el equipo Pramac. Pese a que siguen siendo una máquinas casi perfectas, están lejos de las que llevan Bagnaia, Martín, Bastianini y Morbidelli, la GP24, y esto no es una opinión, si no que ha salido de boca del arquitecto de ambas, Gigi Dall'Igna.
"Entre la GP23 y la 24, este año la diferencia es un poco mayor que en años anteriores. Luego, depende de los circuitos, y, por ejemplo, en Jerez la diferencia era menor", esto se debe a que en 2022, Bastianini plantó cara a Bagnaia, y el año pasado Bezzecchi también estuvo en la pomada, mientras que este 2024, Márquez es quien mejor se ha adaptado y más cerca está de los capos. Aunque, claro está, aún le queda por delante mucho para terminar de entenderla y dominarla.
Un poco más allá en la explicación fue Michele Pirro, el piloto probador de Ducati y otro de los culpables de que el mundial sea una suerte de 'copa Ducati'. El 51 explicó que no hay "ni medio segundo entre las dos motos", además de que en las últimas cinco vueltas de una carrera como la de Jerez, "daba igual tener la GP23 y la GP24", ya que cuando se va al límite, lo que importa "es tu muñeca y el talento que tienes", aunque no todo fueron palos a Marc, del que remarcó que aún necesita algo más de tiempo para estar 100% cómodo con su nueva máquina, pero confía en que lo logre.
Quién sí habló del futuro fue Dall'Igna, que es uno de los encargados de elegir quién se montará en las motos del Lenovo el próximo año, toda vez que una de ellas parece destinada a Pecco. "Tendremos que decir que no a algunos pilotos importantes. Es una decisión muy difícil", a lo que refiere con eso es que se le abren las opciones, y necesitan elegir entre Márquez, Martín y Bastianini para una sola plaza. Ya que los dos españoles han dicho que su objetivo es sí o sí, estar en una moto de fábrica en 2025.