Ducati se declara a Marc Márquez

En el mundo del motor hay algunas uniones que permiten llevar al máximo nivel a un piloto y un equipo, pero en la historia reciente del mundial de MotoGP no hay ninguna que supere a la que estamos viviendo este curso en el Ducati Lenovo con Marc Márquez. Subir al que es uno de los mejores pilotos de la historia a la mejor moto de la parrilla ha terminado con el dominio que se podía esperar. Después de cuatro grandes premios y por lo tanto ocho carreras, el de Cervera ha ganado siete de ellas y solo en la prueba larga de Austin, y porque se fue al suelo cuando iba primero con mucha solvencia.

Por todos estos resultados en la empresa de Borgo Panigale están muy muy contentos con él, tal y como ha expresado el máximo responsable ducatista, Gigi Dall'Igna, que no es alguien muy presto a las palabras, pero cuando lo hace es de obligada escucha. El ingeniero ha confesado en AS lo que primero que le dijo al catalán tras su triunfo: “Le he dicho que ha hecho una carrera preciosa y nos hemos dicho los dos que estamos muy contentos de trabajar juntos”. Y es que si algo está quedando claro es que el piloto siempre es importante y él lo sabe y lo sabía cuando eligió al 93.

Todo controlado en los peores momentos

La de Losail fue una carrera muy loca, quizá la que más en lo que llevamos de calendario. En ella Marc fue controlando, primero desde atrás tras tocarse en la primera con su hermano y después, aguantando para remontar a Morbidelli primero, y después pasando a Maverick Viñales, tras lo que dio una exhibición. Aunque pese al drama, tenía todo controlado, como recalca Gigi: "No me preocupaba y me parecía que tenía la situación bajo control. Cuando se ha puesto después a hacer vueltas rápidas, se ha visto que lo ha gestionado todo bien”.

Además de esto, el italiano también confirmó que la pieza que se dañó en la moto del español si que tenía su importancia para el rendimiento, algo que no terminó de ser clave para el desarrollo a la larga de la prueba. Aunque ya se vio en 2024 que aún con una máquina varias décimas más lentas que las de sus rivales, era capaz de acercarse al resto e incluso superarlos, algo que le ha valido para este año conseguir ser tan sumamente superior.