Francisco Salas4 min lecturaSi hay un nombre que ha cambiado en los últimos años el mundial de MotoGP ese es sin duda Marc Márquez, quien desde su llegada en 2013 se erigió como un elegido, y el tirano que estaba llamado a dominar con mano de hierro el mundial, y lo hizo, vaya si lo hizo. No solo fue campeón en su año de rookie, si no que nadie fue capaz de hacerle sombra, y hasta 2019 sumó seis títulos mundiales. Pero a partir de ese momento la mala suerte le vino a visitar, y entre caídas, los problemas de Honda y varios factores más, todo se le complicó. Tanto que decidió abandonar la marca japonesa y poner rumbo a Ducati, donde tras un año de transición en Gresini, va a subir al equipo oficial, pero no será tan bien recibido como esperaba.
Va a llegar a un corral donde ya hay un gallo, Pecco Bagnaia, campeón en 2022 y 2023, y líder actual del mundial, y el italiano no esconde que pese al respeto que le tiene a Márquez, se ve más fuerte que él. En una entrevista a mowmag, ha opinado sobre su futuro vecino de garaje que antes se decía que (Marc Márquez) habría ganado por goleada con la Ducati, pero ahora que la lleva se dice que no gana porque "no tiene la misma moto", en todo caso, se emplaza al año que viene. "Ahora voy más rápido que Marc. Luego ya veremos, las expectativas que la gente tenía sobre él ciertamente eran muy diferentes. Trabajamos en silencio, nos quedamos en silencio y precisamente, la pista habla. Porque nunca he tolerado esa costumbre de emitir juicios antes de ver la obra".
Pese a estar Marc en Gresini con una GP23, mientras él lleva la GP24 del Lenovo, no son pocas las veces que se han visto en pista, e incluso han acabado en el suelo, como en Jerez. Pero en todo caso, es por la mentalidad ganadora de ambos. Para Pecco las carreras son así, él quiere ganar y va a luchar igual una primera que una décima plaza. "El enfoque de Ayrton Senna...quiero ganar y el resto me importa un carajo. No hay forma de que me conforme con el segundo lugar sin intentarlo primero. Y siempre haré todo lo posible para llegar lo más lejos posible".
Su dinámica de pilotaje y adelantamiento es muy clara es muy, y es que si alguien quiere pasarle, tiende "a abrirse y cruzar", y eso le lleva a tener peleas como la de este año en Jerez o antes en Aragón. Pero aún así, le da igual que sea con Márquez o con quien sea, va a luchar de la misma forma. Pero eso sí, con el 93 el año que viene le va a tocar hacerlo en repetidas ocasiones.