Marc Márquez reapareció de su lesión con muy buenas sensaciones, aunque la moto no ha ido tal y como él esperaba. El español afronta la carrera de Valencia como una prueba bonita por visitar su país, aunque pendiente de probar cosas para la próxima temporada. El piloto de Cervera tampoco dudó en opinar sobre la batalla final por el título de MotoGP entre 'Pecco' Bagnaia y Fabio Quartararo.
"Hay ganas del test del martes y por eso mañana ya lo adelantamos un poco porque en un día tampoco tienes mucho tiempo para probar. Probaremos ciertas cosas para entender el martes y tener un poco el trabajo adelantado. A partir del sábado, me quiero centrar plenamente en el gran premio. En Malasia fui trabajando en diferentes cosas, pero aquí me quiero centrar porque es un circuito que me gusta, que en el pasado he conseguido buenos resultados. Sé que conseguir un resultado como Australia será muy difícil, pero intuyo que puedo hacer un fin de semana mejor que el de Malasia. Intentaremos hacerlo lo mejor posible delante de la afición. Es un año en el que tengo muchas ganas de hacer la última carrera y de terminarlo. Las dos cosas. Tengo ganas de probar el 2023 el martes. Aún no sé exactamente qué traen. No lo hemos hablado, prefiero esperar a saberlo el domingo por la tarde. He sido honesto estas últimas carreras sobre: 'aquí puedo luchar por esto'. Pues mañana sabré ya por dónde van los tiros", explicó detenidamente Márquez.
Cuestionado sobre los que no se juegan nada en la carrera de Valencia, el catalán hizo la siguiente reflexión: "Depende del carácter que tengas, de lo ambicioso que seas. En Malasia, vimos a Dixon pelear a tope con Augusto. ¿Hasta qué punto? Pues Dixon quería hacer un podio y lo consiguió. Tampoco hizo nada fuera del reglamento. En el pasado, no recuerdo el año, carreras en grupo en Australia, que me estaba jugando el Mundial, y acabé con la rueda marcada de Zarco. ¿Pasó? Sí, ¿y qué pasa? Los otros quieren acabar el año de buena manera y te van a luchar al máximo las carreras y más cuando tienen opciones. Nadie va a tirar a nadie a posta, pero nadie va a renunciar a nada. Por suerte, MotoGP está muy sentenciado y Moto2, si Augusto no hace nada raro, también lo tiene bien porque ha mostrado un nivel muy constante", argumentó.
A cerca de quien saldrá campeón, Marquéz no tuvo problemas en mojarse. "Si fuera Augusto y Pecco, gestionaría el fin de semana, hasta el domingo, normal, apretando al máximo. Si fuera Pecco, iría a acabar la carrera y ya está. Un campeonato es un campeonato, arriesgó ya en Malasia. Aquí, yo iría a acabar la carrera y ser campeón. Da igual el resultado. Si fuera Augusto, ahí ya tienes que ver la sensación que tienes. Y depende cómo, o ir a controlar a Ogura o ir a estar delante de Ogura. Tiene dos opciones que las dos son factibles para ser campeón. Yo veo a los dos como campeones el domingo, Augusto y 'Pecco'".
"Pase lo que pase será un buen año en el que hemos aprendido muchas cosas... Solo puedo ganar la carrera y no tengo nada que perder, así que intentaré dar mi máximo y aunque sé que no es la situación ideal para ganar el campeonato, sí que es una buena situación para afrontar una carrera así", reconoció el todavía campeón del mundo de MotoGP en la previa de la carrera que puede darle otro título.
"Hay que seguir empujando igual, pero ser inteligentes, porque estamos en una posición mejor que la de Fabio, aunque tenemos que rematarlo".
El italiano tendrá en Valencia el apoyo de Valentino Rossi. "Es algo fantástico que esté aquí y puede ser una gran ayuda para mí. Él conoce perfectamente esta situación, sabe cómo me siento y me ayudará desde la pista como si fuera un 'coach'", señaló Bagnaia.