Max Verstappen, campeón del mundo desde hace semanas, dio una nueva exhibición en el Gran Premio de Brasil y ganó su 17ª carrera de la temporada tras dominar el acoso inicial de Norris y solventar sin problemas el resto del gran premio. Hasta tal punto fue su superioridad que, según reconocería posteriormente, estuvo en las últimas vueltas más pendiente de la lucha de su compañero Checo Pérez con Fernando Alonso por el tercer cajón del podio.
Tal fue su atención que casi se sale en una curva, ya que estaba pendiente de las pantallas del circuito, que ponían toda su atención en esta emocionante pelea que casi se decidió con la 'photo finish' a favor del español.
Tras el GP de Brasil, casi toda la atención la acaparó el español, por encima del triunfo del neerlandés o del segundo puesto de un Lando Norris que está realizando un final de temporada espectacular. Y también por delante de un fin de semana donde Mercedes ha defraudado y el director del equipo, Toto Wolf, ha calificado como el peor gran premio de la escudería en muchos años.
La lucha entre Checo Pérez y Alonso acabó deportivamente, con los dos abrazados y mandándose mensajes de cariño. Pero sobre la pista fue otra cosa muy diferente. A dos vueltas para el final, el mexicano adelantó al español, que hasta ese momento había controlado con tranquilidad el empuje del segundo piloto de Red Bull, pero en la última vuelta, el piloto asturiano le devolvió el adelantamiento y aguantó como pudo hasta la línea de meta, que cruzó con casi los dos coches en paralelo.
Red Bull se 'precipitó' y celebró por todo lo alto en redes sociales el adelantamiento de Pérez y, aunque poco después rectificó, se encontró con una avalancha de mensajes que se burlaban de ellos por haber celebrado su triunfo antes de tiempo.
"YEEEESSSS!! There goes Checo for P3!", escribió el encargado de las redes sociales de la escudería de Milton Keynes en twitter -ahora X-. Poco después reaccionaría a la hazaña de Alonso con otro mensaje: "ALO re-overtakes Checo on the Final Lap!!". Aunque no se libraría de los correspondientes zascas.
El tercer puesto de Fernando Alonso le devuelve a la cuarta plaza del Mundial, que había perdido horas antes a manos de Carlos Sainz, aunque el piloto de Aston Martin ya tiene a Lando Norris y su McLaren a sólo tres puntos y se aventura lucha en las dos últimas carreras del campeonato.