Muchos hablan sobre dónde está el techo de Fernando Alonso. Siendo uno de los más veteranos de la parrilla de la Fórmula 1, el asturiano parece jugar a otro juego. Hace cosas que ninguno se atrevería y sabe leer las carreras mejor que nadie. Esta temporada con Aston Martin lo hemos visto en diferentes posturas: aguantando un pelotón, realizando pruebas inverosímiles y distintas al resto de pilotos cuando ya no se jugaban nada… Es sin duda de los mejores y también se dice que otro gallo cantaría si corriera con otro monoplaza. Por ello, hay quien lo ve de otro planeta, sobre todo por algunos registros qque demuestran que está como un piloto que acaba de sacarse el carné de conducir.
"Fernando se ha cuidado toda su vida. Su vida ha sido el automovilismo. Ha estado durmiendo, comiendo, viviendo para el automovilismo, y eso es lo que marca la diferencia. No llegas a los 40 en la Fórmula 1 si no te has cuidado al límite, y Fernando sí", decía Pedro de la Rosa en unas declaraciones a Racing365, embajador de Aston Martin y persona cercana del asturiano.
Con la renovación de su contrato, Fernando ha dejado varias pistas sobre su futuro, diciendo que con toda seguridad sería su último contrato como piloto profesional de Fórmula 1. Sin embargo, está por ver cómo acaba esta aventura con Aston Martin. "El hecho de que tenga casi 43 años y que tendrá 45 cuando expire su nuevo contrato, y todavía está hablando de tal vez una extensión futura, creo que lo dice todo. Le conozco desde su época en el karting y no veo el final. Y luego, es uno de esos personajes que, si en algún momento de su carrera ve que su rendimiento está bajando, inmediatamente querrá parar", señalaba Pedro sobre Alonso.
Parece de otro planeta y así lo ha asegurado Pedro de la Rosa. El expiloto llegó a competir con 40 años en HRT y la edad no perdonaba en ciertos aspectos en un deporte donde un milímetro o una milésima de segundos puede ser un factor clave. "Le dije: 'Bueno, lo primero que vas a perder es la vista'. Empecé a pensar en usar lentes de contacto en las carreras, y cosas así. No sentí que estuviera perdiendo velocidad ni tiempos de reacción, pero dije: 'Esta fue mi primera alarma', que tengo que cuidar mi vista. Me dijo que hizo una prueba el otro día y dijo: 'Estoy por encima del 100 por ciento'. Su padre no lleva gafas, así que tal vez este tipo sea Superman", finalizaba el expiloto.