La Fórmula Uno ya está calentando motores, nunca mejor dicho, para lo que se le viene encima en este 2025. Son muchos los cromos que se han intercambiado entre las distintas escuderías y muchas las expectativas que hay puestas en todos estos fichajes.
Y cómo no, el de Lewis Hamilton ya ha provocado las primeras reacciones en la parrilla de salida. Sobre todo, tras la ilusión que despertó el británico en su estreno de rojo. El ya ex de Mercedes confesó haber cumplido otro sueño que le faltaba en sus vitrinas, el de pilotar un monoplaza de Ferrari. Y en Red Bull ya han salido a la palestra para calmar los ánimos frente a aquellos que creen en la resurrección del inglés.
Concretamente, lo ha hecho Helmut Marko y en el diario Bild, defendiendo a Max Verstappen frente a los que están haciendo campaña estos días a favor de Hamilton: "Max no es solo el más rápido, sino que es el mejor de la Fórmula 1 en términos de paquete general. Le saca entre 0,1 y 0,2 segundos al coche por vuelta, algo que ningún otro piloto puede igualar. Ningún Lewis Hamilton o Lando Norris sería capaz de batir a Verstappen en las mismas condiciones".
Y no conforme con esto, el austriaco hace más hincapié en la diferencia entre el británico y el neerlandés: "Lewis Hamilton todavía tiene la velocidad, pero ¿puede tenerla durante toda una temporada? Tengo mis dudas al respecto. Incluso si él tiene un buen Ferrari y nosotros sólo le damos a Max un Red Bull mediocre, yo apostaría por Max".
Eso sí, Marko le ha apretado las tuercas a sus ingenieros: "Nuestra ventana de trabajo tiene que ser más grande. Necesitamos darle a Verstappen un coche que le permita competir por victorias no solo temporalmente, sino de forma consistente". Y es que cabe recordar que Verstappen solo ganó dos carreras en la segunda mitad de este último Mundial.
Por último, el asesor de Red Bull confiesa que si no consiguen satisfacer al tetracampeón del mundo podrían provocar su marcha antes de que acabe su contrato en 2028: "Si no logramos construir un coche que sea competitivo en todas las pistas, no hay razón para que Max se quede con nosotros. Hay que ser realistas".
Unas palabras que coinciden con las de Jos Verstappen, padre del piloto neerlandés: "Su objetivo sigue siendo ganar carreras. Si él siente que eso ya no es posible en Red Bull, un movimiento no está fuera de la ecuación".