Aston Martin prometía mejoras a sus pilotos para el circuito de las Américas, pero de poco les ha servido tras el escaso rendimiento en pista y el fin de semana tan desastroso que han tenido en el Gran Premio de Estados Unidos. Fernando Alonso ha terminado la carrera en una decepcionante pero poco sorprendente decimotercera posición. Tampoco le fue mejor a su compañero, Lance Stroll, que quedó decimoquinto, poniendo fin a un fin de semana desastrosa para la escudería británica.
Tras la carrera Fernando Alonso se mostraba abatido ante los medios, sabe que no hay mucho más que hacer y se rinde ante la posibilidad de tener un mejor resultado en lo que resta de temporada. Asegura que él como piloto hace todo lo posible por detectar los fallos del monoplaza, pero que el equipo no puede hacer mucho más, por lo que las carreras que restan no serán muy diferentes.
Las previsiones del equipo británico eran que el ritmo de carrera era para finalizar la carrera entre el 13 y 14 puesto, y así ha sido. El español no ha podido obrar ningún milagro, como ya hizo en la clasificación el pasado sábado, y ha quedado en la decimotercera posición. La decepción se notaba en sus palabras, demostrando que poco más hay por hacer con este Aston Martin. "Salí bien, pero luego me quedé encajonado. En todo caso daba igual, en 57 vueltas acabas en tu posición, lo preveíamos, no es una sorpresa como sí lo fue clasificar octavo" explica el asturiano, valorando su carrera.
"Muy difícil el fin de semana. Fuimos lentos el sábado y el domingo, hay que subir el nivel para México. Le decimos al equipo lo que le hace falta al coche y luego el equipo hace lo que puede pero hemos encontrado un gran obstáculo toda la temporada y vamos aprendiendo" concluía el bicampeón, que sabe que aún falta mucho por hacer para que la escudería mejore su rendimiento y lanza un dardo esperando respuesta del equipo en pista.
Lo peor es que esa subida de nivel para las próximas carreras no tiene pinta de llegar, ya que el equipo presidido por Lawrence Stroll aseguró que este GP era la última oportunidad para el monoplaza de este año. La escudería británica va a dejar de lado las cinco carreras que restan en el campeonato y empiezan a centrarse en la siguiente temporada, en la que tienen puesta muchas expectativas. Contarán con Adrian Newey para diseñar el monoplaza, por lo que darán un salto de nivel, y quieren prepararlo todo para ser realmente competitivos.