"Hemos quedado noveno y décimo (...) Lo de hoy confirma que hay cuatro equipos un poco por delante de nosotros, como lo eran en Abu Dhabi". "Hay que aceptar que nos faltan esas tres o cuatro décimas de ritmo". "La vuelta de ayer -por la Clasificación del Gran Premio de Bahrein- creo que fue un poco excepcional y nos puso una situación en la que no era real estar tan arriba. Hoy hemos visto la realidad". Los mensajes de Fernando Alonso al final del primer gran premio de la temporada de Fórmula 1 no podían ocultar su decepción.
El piloto asturiano se había ilusionado el viernes con vivir un inicio similar al de la pasada temporada. Su Aston Martin acabó sexto en la Clasificación, pero en la misma décima de sus cuatro predecesores y por delante de los McLaren y del Mercedes de Lewis Hamilton. "Si me hubieras preguntado ayer -si el podio era posible-, te diría que era al 100% imposible, pero ahora no puedo decir eso más. Así que son buenas noticias", decía entonces. Fue la última buena noticia.
El día de la carrera, por la mañana, ya le avisaron que si no ocurría nada extraño acabaría noveno o décimo. Y, en el Circuito Internacional de Sakhir, no ocurrió nada extraño. Todo lo más que los Mercedes tuvieran un problema con el motor que les lastró. Pero las cuatro escuderías punteras -ahora mismo- le aventajaron en medio minuto y él, por el mismo tiempo, a las que venían detrás.
El pesimismo, no obstante, no embarga a Fernando Alonso, quien de momento mantiene la confianza en Aston Martin y en el plan diseñado por Mike Krack y Dan Fallows; y, por eso, pasa página a lo vivido en Bahrein y ya piensa en Jeddah: "La próxima semana correremos en un circuito diferente, con condiciones diferentes también. Vamos a ver qué sucede".
El piloto español hablaba ante los medios desplazados en Bahrein y dejaba claro lo que le falta a su Aston Martin para estar a la altura de los que están delante ahora mismo. "Necesitamos más carga aerodinámica. Cuanto más agarre tengas, mejor cuidas los neumáticos. Tenemos ideas, el concepto del coche ha cambiado. En 2023 estábamos limitados por algún concepto de diseño del coche y no podíamos cambiar piezas que trajesen una evolución potente. Y este año el concepto nos abre una ventana de posibilidades, hemos descubierto varias direcciones en el túnel de viento para mejorar. Aunque supongo que les pasa a todos, no creo que Aston Martin haya encontrado posibilidades de mejora y el resto se eche a dormir. Este es el deporte más complicado del mundo", advertía Fernando Alonso, quien no duda en avisar: "Vamos a intentarlo”.
"Nosotros tenemos un buen plan, un plan de trabajo muy nuestro, muy propio... Y a final de año echaremos cuentas. Ahora hemos empezado más o menos donde estábamos en Abu Dhabi -en la última carrera de 2023-, como quinta fuerza en el campeonato. Ayer nos conseguimos colar en los de delante y ahora hemos vuelto más o menos a esa estabilidad de la quinta fuerza. Veremos, durante la temporada, si hay circuitos que nos vengan mejor y otros que nos vendrán peor. Habrá que estudiar cuántas evoluciones conseguimos traer, carreras que llueve, carreras que hay safety car, carreras que pueden pasar muchas cosas... estaremos ahí siempre para aprovechar las oportunidades".
De momento, el asesor de Aston Martin, Pedro de la Rosa, anunció que tenían previsto traer evoluciones para el monoplaza antes de lo habitual, para las pruebas de Asia (Japón y China), cuarta y quinta del Mundial de Fórmula 1 2024, lo que da cierta esperanza. Una evolución en la que Alonso tiene esperanza y se agarra a lo visto el pasado año. "Vimos cómo, tras un mal inicio, cambiaron las cosas luego en el campeonato, Mercedes subió y McLaren, sobre todo, llegó a ser la segunda fuerza. A ver si podemos ser uno de esos cambios, una de esas sorpresas durante la temporada”, se ilusiona el asturiano.