Francisco Salas3 min lecturaLa etapa de 48 horas estaba llamada a ser el gran momento del Rally Dakar 2025, ya que los casi 1000 kilómetros de especial, sin asistencia y con los pilotos durmiendo al raso en el desierto podrían dinamitar la carrera, y efectivamente así ha sido. Ya sucedió lo mismo en el 2024, cuando Carlos Sainz cimentó muchas de sus opciones de victoria en esta jornada tan dura, sin embargo, este año ha sido todo lo contrario y cualquier opción de triunfo español ha quedado dinamitada, especialmente en coches, con los múltiples problemas de Sainz, Nani Roma y Cristina Gutiérrez.
Ya en la jornada de ayer quedó muy claro que las cosas no iban bien para ninguno de los nuestros, salvo para Nani Roma, que aguantaba el pulso de Al-Attiyah y Al-Rahji, dominadores. Pero tanto Carlos Sainz, que se dejó sus opciones al volcar su Ford, como Cristina Gutiérrez, que se paró a ayudar y después escoltó a Sébastien Loeb hasta el final, no tuvieron la mejor de las suertes. Sin embargo, siguieron en carrera, algo que después del final de la jornada no pueden decir, al menos la burgalesa, que ha tenido un día negro.
La etapa la ha ganado el Toyota de Al-Rahji, seguido de Lategan a 4:16 y Al-Attiyah, el primero de los favoritos, a 6:29. Por su parte, Loeb ha perdido solo 13:08, salvando los muebles después de sufrir mucho ayer. Pero quien no puede decir lo mismo es Carlos Sainz, que ha llegado el 21º, a 1:33:12, perdiendo las esperanzas de conquistar el quinto título en el primer Dakar de Ford. El vuelco les dejó sin cristal delantero, lo que ha complicado mucho la segunda parte de la etapa, además de la puerta, que tuvo que ser sostenida por Lucas Cruz. Un imposible que pese a todo no ha acabado con el 'Matador', que sigue en carrera y buscará sumar kilómetros y ganar etapas con el Raptor.
Cristina Gutiérrez ha salido del recorrido en el km 729, retirándose por un problema en la correa de dirección de su Dacia, y se ha dirigido al vivac acompañada de su camión de asistencia, en busca de poder reengancharse a la carrera mañana, con el objetivo de ayudar en todo lo posible a Al-Attiyah y Loeb. Mientras que Nani Roma también se ha quedado parado por problemas mecánicos a falta de poco más de cien kilómetros, y a esta hora sigue a la espera de una ayuda que le permita mantener vivo el sueño, aunque eso sí, muy lejos de conservar cualquier opción.