Nunca se es demasiado mayor para soñar con la victoria, o eso es lo que debe repetirse Carlos Sainz cada mañana cuando se levanta y va directo a entrenar con un objetivo claro, el de ser campeón del Rally Dakar de nuevo. Y es que en 2023, a sus entonces 61 años, consiguió levantar su cuarto Touareg, ahora a bordo de un Audi.
Sin embargo, la marca de los cuatro aros decidió retirarse de la carrera del desierto para buscar un desafío aún más grande, como el de la llegada a la Fórmula 1. Pero mientras los alemanes dejaban atrás las dunas, el campeón necesitaba nueva máquina para tratar de seguir arriba, y apostó por una novedad en busca de un imposible, ganar en el primer año en el desierto. Y fichó por Ford.
La marca americana desembarcaba en el proyecto con tres fichajes de relumbrón, además de Carlos Sainz, líder y cabeza visible, estaban Nani Roma, campeón en 2014; y Mathias Ekstrom, compañero del 'Matador' en Audi. Y a falta de menos tres meses para el objetivo, se puede decir que van por buen camino. El Raptor debutó en la Baja Hungría con victoria y ahora ya ha estado a los mandos de Sainz en el Rally de Marruecos y pese a algunos problemas, ha cumplido.
Los problemas han sido mayoritariamente técnicos, como el que le impidió al madrileño salir en la segunda etapa, pero lo arreglaron rápido, y han podido ser competitivos. Al final esos 'dolores de crecimiento' son normales y lo importante es el que coche funciona, como quedó patente en la quinta y última etapa, conquistada por el piloto español. Como muestra de que se puede solventar es que el año pasado, con Audi, en Marruecos Sainz pasó un calvario, que no le impidió ganar el Dakar.
El problema es la competencia, ya que, como se ha visto en Marruecos, hay un hombre por encima de todos, el de Nasser Al-Attiyah, su máximo rival histórico, que llega con un proyecto diferente, el de Dacia, pero que realmente es una modernización del antiguo Hunter. El catarí, Sebastian Loeb y Cristina Gutiérrez, los tres pilotos principales de la marca rumana, serán los prototipos a batir. Y es que se puede decir que es el único vehículo más rápido que el Ford, que como se ha demostrado, está por encima de proyectos mucho más asentados como los de Toyota o Mini. No obstante, hablar de esto sirve de poco, porque todo va a depender de lo que suceda en Arabia Saudí en enero.