José Antonio Rivero6 min lecturaLewis Hamilton podría llegar a perder el primer Mundial de F1 de los siete que conquistó durante su carrera debido a Felipe Massa. Hay que remontarse hasta 2008 y recordar lo ocurrido en el GP de Singapur de aquel año, algo que Ecclestone confesó hace unas semanas y por lo que el piloto brasileño estudia emprender acciones legales.
Por aquel entonces, Flavio Briatore, Pat Symonds y Nelsinho Piquet se pusieron de acuerdo para que Massa se estrellara contra el muro en el momento justo, cuando Fernando Alonso lo necesitase, para dar la victoria al asturiano y Renault. Como es lógico, aquello provocó el caos más absoluto, incluido en Ferrari, donde los mecánicos se dejaron la manguera puesta en el 'pit lane'. Un desastre que además no sirvió, puesto que Hamilton acabó ganando el Mundial.
Hay que recordar que FIA llevó una investigación ocho meses después de aquello y se condenó a Briatore, Piquet y Symonds por fraude deportivo, inhabilitándolos durante dos años a cada uno, siendo el piloto español exonerado.
Massa está pensando en reclamar ante la justicia aquel Mundial de 2008 por las recientes declaraciones de Bernie Ecclestone, por aquel entonces máximo mandatario de la Fórmula 1, que admitió que el presidente de la FIA, Max Mosley, conocía lo que había pasado "durante la temporada 2008 y decidió no hacer nada en aquel momento".
No fue hasta el verano de 2009 cuando Renault despidió a Piquet, contando entonces todo el brasileño por su enfado. "Queríamos proteger el deporte y salvarlo de un gran escándalo. Es por eso que traté de persuadir a mi ex piloto Nelson Piquet (el padre, campeón con Bernie en Brabham en los años 80), de que mantuviera la calma", confesó Ecclestone el pasado mes de marzo.
"En ese entonces, había una regla por la que una clasificación de campeonato Mundial era intocable tras la Gala de entrega de premios de la FIA (a final de año). Entonces Hamilton recibió el trofeo y todo quedó así. Pero teníamos suficiente información, en su día, para investigar el asunto. Según los estatutos, deberíamos haber cancelado la carrera en Singapur en aquellas condiciones", siguió reconociendo.
Ecclestone habló de la injusticia de lo ocurrido aquel año, sobre todo de que Massa no fuera campeón "Es de lo único que me arrepiento de todos estos años", dijo.
"Eso significa que nunca debiera haber valido la clasificación del campeonato y entonces Felipe Massa se habría convertido en campeón del mundo y no Lewis Hamilton", concluyó el empresario, ya apartado de la F1, a sus 92 años.
"Hay una regla que dice que cuando se decide un campeonato, desde el momento en que el piloto recibe el trofeo de campeón, ya no se pueden cambiar las cosas, incluso si se ha demostrado que fue un robo... En ese momento, los abogados de Ferrari me hablaron de esta regla. Acudimos a otros abogados y la respuesta fue que no se podía hacer nada. Así que lógicamente creí en que no se podía. Pero después de 15 años, escuchamos que el (ex) dueño de la categoría dice que se enteró en 2008, junto con el presidente de la FIA, y no hicieron nada para no empañar el nombre de la F1", dijo Massa en 'Motorsport.com' sobre las declaraciones de Ecclestone.
"Esto es muy triste, saber que se suponía que el resultado de esta carrera debería haber sido cancelado y que yo tendría un título. Al final, fui yo quien más perdió con este resultado. Entonces, vamos a mirarlo para entender todo esto. Hay reglas, y hay muchas cosas que, dependiendo del país en que sea, no se puede volver atrás después de 15 años para resolver una situación. Pero tengo la intención de estudiar la situación; estudiar lo que dicen las leyes y las reglas. Tenemos que tener una idea de lo que es posible hacer", siguió diciendo el expiloto brasileño.
Massa va más allá y compara su caso con el de Lance Armstrong en el ciclismo. "Ya hemos visto otras situaciones en el deporte, como sucedió con Lance Armstrong, donde se demostró que se dopó y perdió todos los títulos. ¿Cuál es la diferencia?", indicó.
Lo cierto es que Massa tiene complico conseguir algo, puesto que sus opciones legales son reducidas. El derecho a reclamar cualquier revisión caduca a los 14 días del término de la competición y cuatro días antes de la fecha de entrega de premios de la FIA. El brasileño podría implicar a la Corte Internacional de Apelaciones e incluso al TAS, pero se antoja un proceso largo y con difícil resultado a su favor.
