José Antonio Rivero4 min lecturaEl primer Gran Premio de la temporada en Fórmula 1 dio para mucho, aunque sobre todas las cosas destaca el papel de Aston Martin. La escudería británica sorprendió a todos compitiendo con los más grandes, subiéndose al podio con los Red Bull y dejando muy atrás a los que, en teoría, serían sus rivales como Alpine o incluso Mercedes. Todo esto ha tenido consecuencias.
Desde Red Bull están con la 'mosca' detrás de la oreja por la gran actuación de Aston Martin y comenzaron una campaña de difamación en la que acusan de plagio a una parte del AMR23.
Sergio 'Checo' Pérez, en la rueda de prensa posterior a la carrera, soltó que era "agradable ver tres coches de Red Bull en el podio".
"Hoy hemos tenido tres Red Bull en el podio, ¡solo que el último con un motor diferente!", dijo luego Helmut Marko, asesor de Red Bull.
El último en 'tirar la piedra' contra Aston Martin fue Christian Horner, el jefe de la escudería austriaca. "Es halagador ver el parecido de ese coche con el nuestro. Dicen que la imitación es la mayor forma de adulación y es bueno ver que el viejo coche va tan bien", dijo Horner en 'Servus TV', la televisión oficial de Red Bulls.
En la escudería austriaca no está sentando bien que Aston Martin se lleve a sus mejores talentos. Uno de estos casos es el de Dan Fallows, jefe de aerodinámica de Red Bull que ahora es el director técnico de Aston Martin.
El siete veces campeón del mundo, Lewis Hamilton, solo pudo ser sexto en el Gran Premio de Bahréin, mientras que su compañero Russell acabó séptimo. El Mercedes W14 tiene problemas por falta de ritmo, algo que frustró al piloto inglés, que se ve muy lejos de los de arriba.
"El año pasado les conté los problemas que tenía el coche. He conducido muchos coches en mi vida, así que sé lo que un coche necesita y lo que no. Y creo que se trata de rendir cuentas, de asumirlo y decir 'sí, sabes qué, no te escuchamos', no está donde tiene que estar y tenemos que trabajar", sentenció Hamilton a la 'BBC', mostrando su enfado por su prácticamente nula participación en el desarrollo del coche.
Toto Wolff, el jefe de Mercedes, también hizo visible la frustración de la escudería en declaraciones a 'Sky Sports'. "Nos falta ritmo delante, a la derecha y al centro. Ese es el reflejo de las pruebas. El Aston Martin es muy rápido, se lo merecen, y Red Bull está en un planeta diferente... Creo que eso es lo que duele, porque están muy por delante. Me recuerda a nuestros mejores años, cuando sacábamos un segundo (por vuelta) a todos los demás", afirmó.
