Alberto Gálvez4 min lecturaTras casi un mes sin rugidos de motor, vuelve la F1. Y lo hará con Fernando Alonso en la tercera plaza del Mundial y con un nuevo formato que se estrenará en Bakú. Después de tres carreras en las que el piloto español ha quedado siempre tercero con su monoplaza de Aston Marin y en las que Red Bull ha seguido con su dominio absoluto, el panorama podría comenzar a cambiar.
Al menos, ese podría ser el objetivo trazado por la Federación Internacional el Automovilismo. En el Gran Premio de Azerbaiyán llegará la primera carrera al sprint de la temporada y habrá muchas novedades. La intención de los organizadores va a ser que el final del campeonato sea algo más reñido que en 2022 y en la escudería austríaca lo saben y temen por ello.
“Sabemos que no tendremos la misma capacidad de desarrollo que otros equipos en cuanto al túnel de viento conforme avance la temporada. Así que para nosotros es fundamental sumar tantos puntos como sea posible y progresar en ambos campeonatos tanto como podamos, porque los otros van a llegar en la segunda mitad del año”, afirma Christian Horner, jefe de Red Bull, preocupado por la progresión del resto de equipos conforme avance la temporada.
En la actualidad, los de Milton Keynes suman casi el doble de puntos (123) que Aston Martin (65) en la clasificación pero, con la reducción de tiempo que tienen en el túnel de viento fruto de la sanción por incumplir el techo de gasto en 2021 y de haber ganado el título en 2022, la distancia podría comenzar a reducirse.
Hay que recordar que en las reglas de la Fórmula Uno viene estipulado que en el túnel de viento, donde se realizan las simulaciones computacionales del comportamiento de fluidos, todos los equipos disponen de 320 ensayos que equivalen a 400 horas, 80 de las cuales son con la máquina en marcha. Sin embargo, desde 2022, esa cifra se multiplica por un coeficiente en función del puesto del equipo en el Mundial anterior.
Así, como Aston Martin quedó séptimo en la clasificación de constructores, el equipo de Fernando Alonso es el único de las grandes escuderías que disponen del 100% de dicho tiempo. Red Bull tiene solo el 70% (56 horas), Ferrari un 75% (60 horas) y Mercedes, 80% (64 horas).
No obstante, en la escudería británica, nadie quiere alzar las campanas al vuelo por este tema. “Es verdad que tenemos más tiempo de desarrollo, pero no debemos olvidar que hay una desventaja enorme para cerrar y ellos tampoco estarán parados, también tienen algo de tiempo (en el túnel de viento). Será difícil, intentaremos todo para mejorar nuestro coche”, ha subrayado Mike Krack, ‘team principal’ de Aston Martin.