Pese a su caída en Tailandia, juntos cuando peleaba con el grupo de cabeza, Álex Márquez se siente plenamente satisfecho con su temporada en MotoGP. Tras un periodo complicado en Honda, se ha reencontrado consigo mismo con la Ducati, dentro del equipo Gresini Racing, donde el próximo año acogerá a su hermano Marc, que ha dejado a su nuevo equipo por mentirosos.
“En términos de felicidad, de disfrutar encima de la moto y del equipo, sentirme bien, de los más top es este año. Es verdad que en Moto3 en el equipo de Estrella Galicia y Monlau me sentí muy a gusto, y también en Marc VDS en Moto2, pero este es de los más top, de los que estoy disfrutando más, de los que estoy más relajado también. Y de resultados, quizás no, pero lo que te digo, de lo que es paddock, equipo y disfrutar, de los que más”, ha asegurado el menor de los hermanos Márquez en una entrevista con Relevo.
Mirando ya de reojo a 2024, Álex es consciente de que la presión sobre su rendimiento aumentará en su segundo año en la escudería italiana, si bien cree que la llegada del seis veces campeón del mundo de MotoGP le puede beneficiar en este sentido. “De alguna manera hará que el foco estará en otro lado. Sí que es verdad que este año, al empezar bien y estar ahí arriba, he sentido la presión de todo el equipo, dependían un poco de ti en muchas carreras porque tu compañero estaba sufriendo más. Puede también darme una ventaja, porque el foco puede estar en él y yo poder trabajar en la sombra, y eso es algo que siempre he dicho que me gusta”, señaló al respecto.
“Me gusta tener presión, cuando toca, pero trabajar en la sombra y llegar sin hacer ruido y tocar a la puerta sin que nadie se lo espere, eso también me gusta”, añadió, al tiempo que lanzó una advertencia a su propio equipo ante la llegada de un fenómeno de masas como Marc Márquez, que traerá consigo una revolución de la que Gresini, según Álex, todavía no es consciente.
“Es algo que no me va a cambiar tanto sino al equipo, la exposición que tendrá el equipo y la presión que tendrá en general. Creo que ni se lo imaginan. Hasta que no vean a Marc en Valencia en el box, creo que es algo a lo que nadie se hace a la idea. Yo lo viví en Repsol, pero ellos no se hacen a la idea”, señaló.
Además, el de Cervera confesó que, más allá de ejercer de compañero de su hermano, su objetivo es darlo todo en un año que considera “clave”, debido al hecho de que “en 2024 se abren los contratos y siempre quieres estar bien posicionado para no tener que llamar a ninguna puerta, sino que llamen a la tuya”.
“El segundo año siempre tiene que ser mejor que el primero y tiene que venir esa constancia que nos ha faltado. Si vendrá o no, el futuro lo dirá. Pero el conocer más la moto y, sobre todo, conocerte con el equipo, hace que algunos pequeños errores que hayamos hecho este año, no sólo de caídas, sino dentro del box, de malentendidos, de lo que sea, el conocerte más hace que ya no pase y que como equipo seas mucho más completo”, destacó sobre sus aspiraciones.
Por otro lado, Álex Márquez se refirió a la pelea por el Mundial de MotoGP entre Pecco Bagnaia y Jorge Martín, quien ha reconocido no llevarse muy bien con Marc, ambos con una Ducati. En este sentido, el campeón de Moto3 y Moto2 prevé una igualada batalla sin tratos de favor por parte de la fábrica italiana. “Estoy seguro de que les van a dejar correr hasta el final a los dos, tienen la misma moto, no va a haber ninguna prioridad por parte de Ducati. Si hay alguien legal y limpio en ese aspecto es Gigi Dall'Igna (el máximo responsable de la marca), que quiere que gane la moto, y que gane el mejor piloto”, sentenció.