El español
Marc Márquez (Repsol Honda RC 213 V) hizo valer su extrema eficacia en el circuito de Las Américas, escenario del Gran Premio de Austin de MotoGP para dar un giro al mundial con la que fue su quinta victoria consecutiva en el trazado estadounidense.
La que debía ser "la prueba del algodón" lo acabó siendo pues si bien en los entrenamientos quedaron por aclarar algunas dudas, con el extraordinario mano a mano que protagonizaron Marc Márquez y
Maverick Viñales. La situación cambió radicalmente en competición ya que el de Repsol Honda hizo una carrera impecable y el de Yamaha falló desde el principio.
Viñales no salió bien, primer fallo, y se enzarzó en una pelea descompensada con
Jorge Lorenzo y su Ducati Desmosedici en la primera vuelta, lo que le obligó a forzar el ritmo para evitar que por delante se escapasen los dos pilotos de Repsol Honda, Márquez y Dani Pedrosa, por entonces líder, y su propio compañero de equipo, el italiano
Valentino Rossi, que acabó siendo el más beneficiado por las circunstancias. Esa presión inicial sobre Maverick Viñales fue la que le llevó a cometer un error con el que le devolvió "el favor" a Marc Márquez, un cero del primero en Austin por otro del segundo en Argentina.
La caída de Viñales supuso un golpe de efecto también para
Valentino Rossi, sabedor de que una buena clasificación le colocaba líder del mundial, posición que no ocupaba desde antes de la disputa del controvertido Gran Premio de la Comunidad Valenciana en 2015 y esperó su momento, como también Márquez. Dani Pedrosa intentó dar la campanada liderando la carrera, pero
Marc Márquez se mantuvo tras él más tiempo del previsto no porque no pudiese superarlo, sino porque al hacerlo no quería cometer errores que le hiciesen caer y le dejasen nuevamente sin puntuar, una situación que no podía ni contemplar.
Así,
Marc Márquez esperó su oportunidad, planteó una estrategia en la segunda parte de la carrera perfecta y se hizo con la primera victoria del año que, con quince grandes premios por delante, prácticamente devuelve a los aspirantes a la formación de salida inicial, pues si bien
Rossi es líder, apenas cuenta con seis puntos de ventaja sobre
Viñales y 18 respecto a Márquez cuando hay 375 puntos todavía en juego. El mundial no ha hecho más que empezar, pero la victoria de Marc Márquez en Austin deja sus "señas de identidad en el algodón" y pone sobre el tapete los vicios de unos y las virtudes de otros, en particular por cuanto se refiere a las cuestiones técnicas, en donde Yamaha aventaja a Honda claramente y la diferencia la marca el triple campeón del mundo.
Quien no falló y apunta como el más claro favorito al título en Moto2 es el italiano
Franco Morbidelli, que sumó su tercera victoria consecutiva y se destaca con claridad en la clasificación provisional del mundial, en tanto que en Moto3 falló el español Joan Mir, que sólo pudo ser octavo, lo que unido a la victoria de Romano Fenati, la caída de Arón Canet y la segunda plaza de
Jorge Martín equilibra y mucho las fuerzas de todos los contendientes.