Rafael Nadal y Carlos Alcaraz afrontan este martes su segundo compromiso como pareja en los Juegos Olímpicos de París 2024. Lo harán ante los representantes de los Países Bajos Tallon Griekspoor y Wesley Koolhof, un duelo en el que son favoritos, pero en el que no se pueden confiar, ya que el primero es todo un Top-30 del ránking de la ATP y el segundo un doblista consumado que ha sido número uno del mundo en esta modalidad.
A priori, la pareja española, con poca experiencia en dobles y que nunca había jugado junta, no entraba en las apuestas, pese a la expectación que había despertado. Sin embargo, todo ha cambiado después de su debut ante los argentinos Máximo González y Andrés Molteni, a los que vencieron por 7-6(4) y 6-4. El resultado fue ajustado y se decidió por detalles, pero hay que tener en cuenta que los suramericanos partían como sextos cabezas de serie y son habituales en el cuadro de dobles de los mejores torneos.
Rafa Nadal sí sabe lo que es jugar en esta modalidad. Ya lo hizo en alguna ocasión en Copa Davis, en eliminatorias importantes, y ha jugado alguna vez con amigos y hasta haciendo pareja con Roger Federer o Novak Djokovic. Su mayor éxito lo logró en unos Juegos Olímpicos, junto a uno de los que hoy forman parte de su cuerpo técnico, Marc López. El catalán y el balear se coronaron en Río de Janeiro 2016 con el oro.
Sin embargo, Carlos Alcaraz es novato en esta modalidad, que no ha jugado nunca desde que dio el salto al circuito grande. Pese a ello, se dejó llevar en su debut por la veteranía de Nadal y no desentonó ante los argentinos. Estuvo bien en la red y, con el saque, demostró lo que ya viene ofreciendo en el plano individual todos los partidos.
Sin embargo, hay quien lo ve de otra forma y, aunque fuera de broma, la pareja española 'molesta' a todo un medalla de plata olímpico. El norteamericano Mardy Fish, subcampeón en Atenas 2024, cuando perdió la final olímpica ante el chileno Nicolás Massú, dejó su opinión sobre la pareja española y pidió... su expulsión de los Juegos de París 2024.
"Declaro que este equipo no es justo", publicó el extenista norteamericano en X -antigua Twitter-, antes de añadir: "Descalifíquenlos por ser demasiado buenos inmediatamente".
Está claro que la expectación que ha despertado ver a uno de los tres componentes del Big-3 junto al mayor talento del tenis actual ha roto moldes. No es normal que un partido de dobles de primera ronda se dispute en la pista Central (Philippe Chartier) de Roland Garros o que, el de segunda, sea en la Suzanne Lenglen. Y que la primera se llene y la segunda apunta a que se repetirá la misma historia. Ver a Nadal, puede que por última vez, junto a Alcaraz no tiene precio.