España quiere demostrar en estos Juegos Olímpicos que es la primera potencia del momento en fútbol. Los resultados lo avalan. En fútbol masculino se consiguió la reciente Eurocopa de Alemania y el Europeo sub 19. En fútbol femenino, aún resuena el Mundial del pasado verano en Australia y Nueva Zelanda y la Liga de Naciones conquistada en febrero. Con la competición parisina al borde de la finalización, los nuestros siguen en lo más alto y podrían lograr algo histórico.
Nadie puede igualar el nivel español en el deporte rey. Los últimos resultados evidencian una superioridad aplastante que tiene su continuidad en los Juegos Olímpicos de París. Este lunes, la selección masculina accedía la final después de derrotar (1-2) a Marruecos en un tenso encuentro. Los magrebíes se adelantaron en la primera mitad con un gol de penalti, obra de Rahimi. Ya en la segunda parte, los de Santi Denia voltearon el marcador gracias a los goles de Fermín López y Juanlu Sánchez. España luchará por el oro en la final del viernes ante Francia.
Este martes será el turno para la Selección femenina. El conjunto que entrena Montse Tomé se medirá a Brasil en las semifinales a partir de las 21.00 horas. Las nuestras derrotaron por penaltis a Colombia en cuartos de final y volverán a verse las caras con las brasileñas. En la fase de grupo se consiguió la victoria por 0-2 con goles de Athenea del Castillo y Alexia Putellas.
Pero lo más llamativo de la previa de este duelo gira en torno a la figura de Jenni Hermoso. La delantera madrileña no está gozando de demasiadas oportunidades en estos Juegos Olímpicos y ha mostrado su disconformidad pública. Algo que no ha gustado a la seleccionadora Montse Tomé, que se ha referido al asunto en la rueda de prensa celebrada antes del choque.
Hermoso afirmó tras el duelo ante Colombia: "Sigo siendo la misma jugadora que hace un mes, dos meses, tres días. Me sigo sintiendo igual de bien. Hay cosas que no tienen respuesta. Ahora estoy aquí teniendo un rol diferente y aceptándolo o no es lo que me toca", aseguró Jenni. Que también añadió: "Son decisiones que se van o están fuera de mi control y no tengo una respuesta para darte. Es lo que me está tocando", precisó.
Ahora es Tomé la que recoge el testigo y le dejó las cosas claras a la atacante: "Ella es una jugadora que siempre ha jugado y ellas tienen que empezar a aceptar que el fútbol es esto. Así que, como he dicho, Jenni es una grandísima jugadora, está aceptando su rol, es algo nuevo y al final ha tenido el tiempo para jugar como si jugara de inicio", apuntó ante los medios.
Y dio más detalles: "Estas jugadoras han aceptado su rol. Hemos podido iniciar de una manera y luego cambiar en otros partidos. Si pudiéramos jugar con 22, jugarían todas y a todas les daríamos un rol, pero este deporte es así. Inician 11, pero luego las que puedan entrar tienen capacidad para cambiar el partido y seguir siendo España. Estoy realmente muy contenta con todas".
Una polémica que llega a las puertas de una semifinal olímpica donde España quiere hacer historia y lograr el oro en ambas modalidades futbolísticas.