Los Juegos Olímpicos están a la vuelta de la esquina, y desde este viernes 26 -de forma oficial, porque desde el miércoles 24 ya hay competiciones- y hasta el domingo 11, van a tener lugar en París, una ciudad que se ha blindado para que todo sea un éxito absoluto. En los últimos años la capital gala ha sido sede de grandes eventos, pero no todos han salido a la perfección. En el recuerdo está la final de la Champions League de 2022, que tuvo lugar precisamente en el Stade de France, sede del atletismo en estos JJOO. Pues bien, aquel día los problemas de seguridad colapsaron la ciudad, hasta el punto de que por los disturbios en las entradas se tuvo que retrasar el inicio del duelo media hora. Así que para que eso no suceda, en esta ocasión han tomado medidas drásticas.
Tanto como que un total de 4.355 personas han sido descartadas durante la preparación de los Juegos Olímpicos porque representaban algún tipo de amenaza en los controles llevados a cabo por las fuerzas del orden francesas. La cifra la comunicó el ministro francés de Interior, Gérald Darmanin, que en una entrevista al canal France 2 este domingo por la noche destacó que se han llevado a cabo un millón de investigaciones administrativas sobre las personas implicadas de cerca o de lejos por el evento.
De esos 4.355 excluidos, hay 880 sobre los que había sospechas por posibles injerencias extranjeras, 360 estaban pendientes de una expulsión de Francia. También entre ellos, 260 estaban fichados por los servicios secretos por radicalismo islámico, 186 por formar parte de grupos de ultraizquierda y 96 de la ultraderecha. Las investigaciones se han llevado a cabo entre los voluntarios, agentes de seguridad, atletas, entrenadores, periodistas o incluso vecinos del área acotada del centro de París por donde discurrirá la ceremonia de apertura de los Juegos Olímpicos este viernes.
Los Juegos aún no han empezado, pero ya son una realidad, y es que en Francia llevan meses muy preocupados por diversos temas; para empezar, el ya mencionado de la seguridad; pero sin olvidar al covid, que ha vuelto en muy mal momento; a la salubridad del agua del Sena, sede de la ceremonia de apertura y del triatlón y las aguas abiertas. De hecho, hasta el clima ha sido un problema, porque han caído fuertes precipitaciones en las semanas previas, que han causado una gran alerta en todo el país.